Con el fin de comenzar a cobrar al usuario según la cantidad de agua potable que utilice, desde OSSE decidieron colocar medidores en las viviendas. Y según dijo su titular, Cristian Andino, la idea es instalar unos 660 aparatos antes de fin de año. Esto se hará en las zonas residenciales y comenzarán por el barrio Del Bono y el sector aledaño.
Según Andino, esto se concretará porque es un proyecto que asumió la Provincia con el ENOHSA (Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento), que es quien financia las obras de fortalecimiento institucional, como la construcción y mejoras de cloacas en varios departamentos. Este proyecto indica que en el periodo de un año OSSE debe instalar 2 mil medidores. Proceso que se repetirá durante 4 años. Así se controlará a 8 mil de las 150 mil cuentas que tiene el ente en la provincia.
“Los mapeos que se hacen desde el 2008, indican que las zonas de más derroche es en el barrio Del Bono y los barrios aledaños, por los grandes jardines y sectores parquizados que poseen” dijo Andino.
Dando detalles de cómo va a funcionar el sistema de control del agua potable, Andino explicó que en principio el usuario va recibir 2 boletas. Una de ellas será igual a la que recibe actualmente y será la que deberá abonar. O sea que seguirá pagando el mismo monto. Y la segunda detallará cuál fue el exceso y cuánto sería el monto que debería pagar, pero este pago no se hará efectivo. “Será para que la gente tenga noción de lo que más adelante se va a cobrar” dijo, pero no dio fecha sobre cuándo se hará efectivo el cobro. Es que aún no tienen definido cuál será el monto por litro extra y cuál será la cantidad de agua base que deberá consumir el usuario para seguir pagando lo mismo. “La Organización Mundial de Salud indica que una persona debe consumir 300 litros por mes, pero pensamos que la base en San Juan va a ser mayor por el clima desértico” dijo Andino que explicó que en promedio una persona consume actualmente unos 600 litros en 30 días.
