A pesar de que el Centro Comercial de San Juan recomendó atender en forma normal, ayer en la primera jornada del doble feriado de carnaval fueron más lo negocios cerrados que los que eligieron abrir al público.
No obstante, estos últimos salieron ganando al registrarse una inusual afluencia de público para un día feriado, al menos en el microcentro, y durante las horas de la mañana. Los cafés al aire libre estaban repletos, en tanto que en las calles peatonales se podían ver desde grupos de amigas a familias completas que cargaban sus bolsas de compras, especialmente de indumentaria y calzado escolar.
Por la tarde estuvo más flojo y salvo las casas de calzados, librerías o venta colegial, muchos optaron por no abrir. Para hoy, sin embargo, esperan más comercios abiertos ante el inminente inicio de clases, según anticiparon directivos tanto del centro comercial como del Sindicato Empleados de Comercio que ayer salieron a hacer relevamientos (ver aparte).
El panorama en los negocios ayer tenía múltiples variantes: las cadenas nacionales de electrodomésticos -salvo Musimundo- y tiendas o franquicias como Falabella o Dexter no abrieron, como tampoco negocios locales grandes como Maxi Brant y Galver, o las galerías que rodean la Plaza 25 de Mayo. Algunos locales sólo abrieron por la mañana y en la tarde no, como Modas Olga; y había otros que respetaron el feriado de ayer pero hoy sí abrirán, según avisaron con carteles pegados en las vidrieras. ‘Es que hay casas que tienen muchos empleados y por ahí prefieren abrir mañana (por hoy)’, dijo Enrique Peña, secretario gremial del Sindicato Empleados de Comercio. ‘Para nosotros, el 80% de los negocios abrió en la mañana, pero en la tarde seguro serán menos’, dijo Hermes Rodríguez, desde el Centro Comercial.
El dirigente agregó que hoy la apertura de locales será mayor. ‘Aquí tuvimos una muy buena venta, vino mucha gente. Los que no abrieron, ¡perdieron!’, dijo la encargada de una librería ubicada en Laprida entre Tucumán y General Acha. ‘Está bueno comprar en feriado’ dijo Pablo Marquez, quien junto a su esposa María Eugenia probaban zapatillas a sus dos hijos en Casa 2000.
‘Ha venido más gente de lo esperado. Y se mueve no sólo por la venta escolar, sino también por las mujeres que vienen a buscar chatitas o calzado más cerrado’, dijo la encargada de Vallejo. ‘Nosotros vamos a abrir los dos días, a lo mejor mañana entramos o cerramos restando media hora de la jornada normal’, explicó un encargado de Martinazzo en la Peatonal.
