Era el partido más difícil de su vida. Y no bajó los brazos hasta el final. Carlos Andrés “Pepillo” Rodríguez, a sus 67 años, perdió ayer en la madrugada su vida tras combatir un cáncer de pulmón. La noticia conmovió no sólo al mundo futbolístico y hockístico sanjuanino, sino también a buena parte de la sociedad que supo conocerlo destacándose en Desamparados en los ‘60 y ‘70. Ayer comenzó el velatorio en las salas Vallecito, del departamento de Pocito, mientras que hoy a las 10 será el entierro, en el Cementerio Parque San José (calle Lemos y 6).
Hasta anoche estaba previsto que antes de la despedida final, el acompañamiento transite por el club Aberastain, institución en la que nació Rodríguez como jugador de fútbol. Es que el “Naranja”, junto a Desamparados, fueron sus ‘segundas casas’. Es más, en junio pasado, los pocitanos le realizaron un emotivo homenaje por su dedicación como dirigente de hockey y por su pasado de futbolista. En dicha distinción la cancha de hockey fue rebautizada con su nombre.
A “Pepillo” le descubrieron la enfermedad pulmonar a principio de año, aunque no fumaba un cigarrillo desde hacía 37 años. “Sus compañeros contaban que en el entretiempo de los partidos se prendía un pucho”, señaló Carlos Enrique Rodríguez, el hijo menor del ídolo que pasó por el puyutano a fines de la década del ‘60 y a principios del 70. Luego agregó: “De cabeza estaba muy bien, con muchas ganas de vivir”. No obstante, tras pasar una semana en el hospital Marcial Quiroga, los últimos 15 días de vida decidió permanecerlos en su domicilio, junto a su familia.
Rodríguez no sólo trascendió por sus dotes de futbolista. Su calidad humana era una de sus mayores virtudes. Por ser una persona muy activa, ayer los afectos que lo despidieron eran familiares, vecinos, amigos, ex futbolistas y hasta los integrantes del Centro de Jubilados y Pensionados Segunda Juventud, institución en la que él era presidente. “Estuvo en todo, era muy intruso. Pero nos dejó un legado: hay que ser buena persona”, declaró su esposa, Carmen Sirera, quien se puso de novia con Pepillo en 1974 y se casó con él para tener dos hijos y una hija.
