A la polémica por el ingreso de vino chileno al país que se desató el lunes, ayer se sumó el malestar del sector tomatero y del gobierno a raíz de que uno de los principales compradores de la producción sanjuanina informó que no abrirá la fábrica de conservas en Mendoza y traerá toda la pasta de tomate de China la próxima temporada. La empresa es la mendocina RPB Baggio, la misma alimenticia que ya comenzó a importar vino desde Chile, informaron desde el gobierno y el sector privado. Esta firma es la segunda compradora del tomate sanjuanino, quedándose con el 22% de la producción total, después de la sanjuanina La Campagnola (Ex Frutos de Cuyo, de Arcor), que absorbe casi el 39%. El tercer y cuarto lugar lo ocupa Salto de la Rosa (Molto) con el 8% y Solvencio con el 7%; y el resto queda en una decena de firmas locales lideradas por Almar. En la Cámara de Producción, Empaque y Comercio (CPEC), que reúne a los principales tomateros de la provincia, explicaron que la decisión de la mendocina afecta a unos 30 productores locales y a 37 millones de kilos provenientes de unas 352 hectáreas de tomate industrial o perita. Cada año Argentina importa el 40% del tomate en conserva que se consume porque la producción interna aún es insuficiente. Pero el cierre de una fábrica que estaba realizando el procesamiento local y el aumento de la importación descalabra el negocio del sector que se ha propuesto seguir creciendo para lograr el autoabastecimiento.
Tanto desde el Ministerio de Producción, como los productores sanjuaninos de tomates denunciaron ayer la maniobra que aseguran que provocará una baja en el precio del producto en la temporada que arrancará en un par de meses.
‘’Hay un enojo bastante grande porque se ve mucha especulación en el negocio. Estos señores están cerrando una fábrica para importar toda la pasta, da mucha bronca porque esto indudablemente ocasionara una baja en los precios’’, dijo el presidente de CPEC, José Luis Martín. ‘’Lo que está haciendo con los vinos, también lo hará con la pasta del tomate. RPB no piensa comprarle nada a los productores, quedarían varios sin la posibilidad de vender el tomate’’, se quejó el titular de Producción, Andrés Díaz Cano, quien agregó que el Gobierno planteará la situación de esa firma ante el Ministerio de Agroindustria de la Nación. Los tomateros locales agregaron que han tomado contacto con legisladores nacionales y le han propuesto que se impulse un proyecto de ley para limitar la importación de la pulpa de tomate sólo a las empresas que inviertan y den empleo en el mercado interno. ‘’Esa misma propuesta le haremos hoy a funcionarios nacionales’, anticipó Martín. Indudablemente el tema de la importación será el que ocupará hoy el debate en la Primera Mesa Nacional del Tomate, que se realiza en un hotel céntrico (ver recuadro).
En San Juan hay una 1.600 hectáreas de tomates que empezarán a ser cosechados entre Navidad y Año Nuevo, una tarea que se extenderá hasta mayo del 2017. De el total de la producción sanjuanina, alrededor del 60% salen rumbo a Mendoza principalmente para ser procesadas, debido a que la provincia no cuenta con suficiente capacidad industrializadora.
105 mil son los kilos por hectárea que se producen en San Juan, el mayor rendimiento del país. Hay unos 90 productores en total.
Mesa nacional
En la mañana de hoy, a partir de las 9, se realiza la primera Mesa Nacional del Tomate que reunirá en torno a la misma mesa a productores, industriales, viveristas, representantes de organismos y cámara del sector y funcionarios del Gobierno provincial y de la Nación. Esta reunión tiene como objetivo armar una entidad de consenso donde se junten todos los actores a nivel nacional con las autoridades de gobierno para analizar cuáles son los problemas que tienen el sector y analizar en conjunto las posibles soluciones. La organización de este órgano público-privado surgió de sucesivos encuentros del tomate que se vinieron realizando en el último tiempo.

