El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, señaló que América latina debe estar alerta tras el intento de golpe de Estado en Ecuador, ya que podrían producirse situaciones parecidas en otros lugares del continente debido al accionar de minorías que buscan coyunturas "para provocar desestabilizaciones”.

Según las expresiones del diplomático, en la OEA se pensaba que el golpe en Honduras, de junio del año pasado, que derrocó al presidente Manuel Zelaya, fue una excepción en una región que gozó por años de estabilidad democrática. Sin embargo, el reciente intento golpista contra el gobierno del ecuatoriano Rafael Correa, controlado de inmediato, indica que la democracia de la región sigue expuesta a los intentos desestabilizadores y si no avanzan es porque las insurrecciones no encuentran el apoyo buscado en la población civil.

La democracia de Ecuador, que es sólida, resistió un ataque importante, aunque dejó diez muertos, varios heridos y una secuela política todavía no resuelta motivo por el cual Insulza hizo un llamado para contrarrestar los embates al Estado de derecho, mediante un esfuerzo para profundizar el "diálogo y la amistad cívica”. Precisamente, los desvíos y atropellos de la institucionalidad por parte de los gobiernos autoritarios y hegemónicos que desvirtúan la democracia denostando y persiguiendo a los que los critican, o que niegan la pluralidad participativa, es el caldo de cultivo que alimenta alimenta al golpismo en cierne.

El mejor antídoto contra el golpe de Estado es fortalecer a la democracia respetando estrictamente los plenos derechos y garantías que debe gozar un pueblo soberano.