El caso del asesor legislativo Roberto Larosa, detenido días atrás cuando permanecía en extrañas circunstancias dentro del Palacio de Hacienda, motivó ayer serie de allanamientos en la consultora económica del ex ministro de Economía Roberto Lavagna y otros cuatro estudios de ese rubro.

En torno a la detención de Larosa, además, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández y el diputado de Proyecto Sur Fernando Solanas mantuvieron ayer otro fuerte cruce verbal.

El jefe de Gabinete calificó como "oportunista", "garca" y "estúpido" a Solanas quien, por su parte, dijo que hacía responsable al funcionario de su "seguridad personal y la de todos los opositores".

Los allanamientos a las oficinas de "Ecolatina", fundada por Lavagna, así como las consultoras "M&S", de Carlos Melconian, "Estudio Broda", de Miguel Angel Broda, la del economista Orlando Ferreres y FIEL estuvieron a cargo de efectivos de la Policía Federal que cumplieron órdenes del juez federal Claudio Bonadío, a cargo de la causa en que Larrosa permanece detenido en el penal de Marcos Paz. También fue allanada la empresa estatal del servicio de agua, AySA.

El juez mandó a ejecutar el operativo en las consultoras en busca de documentos acerca de la presunta compra de información sensible del Ministerio de Economía a Larosa por parte de esas firmas, ya que en la casa del asesor legislativo fueron encontradas facturas por valores de entre 700 y 1.500 pesos, confiaron fuentes judiciales.

Larosa, que trabaja con el senador José Martínez (ARI, Tierra del Fuego) y asesora "ad honorem" al diputado Claudio Lozano (Proyecto Sur), ingresó a las siete de la tarde del viernes 16 al Ministerio y pasadas las 21 fue sorprendido en el interior del despacho del subsecretario de Presupuesto, Raúl Rigo, tras abrir la puerta con una llave propia.

De acuerdo a la versión difundida por el ministro de Economía, Amado Boudou, Larosa ingresó al edificio diciendo ser "periodista" y que concurría a una entrevista, pero que fue atrapado en momentos en que quería esconderse debajo de un escritorio.

El propio Boudou dijo que Larosa habría estado allí en busca de información para el diputado Lozano.

Desde Proyecto Sur, denunciaron que el Gobierno "armó" la detención de Larrosa y la vinculó a Lozano, en "represalia" porque ese legislador votó la semana pasada a favor del rechazo del decreto presidencial 298 que creaba el Fondo de Desendeudamiento Argentino.

Ayer por la mañana, el cineasta volvió a repudiar los escraches y pegatinas de afiches en contra de políticos opositores y periodistas, y sostuvo que hace "responsable a este ministro que me encanta, que me querella, a Aníbal Fernández y al Gobierno nacional, sobre mi seguridad personal y la de todos los opositores".

"El límite entre el escrache y la agresión física es chiquitito, un pelo. A los que denuncian las cosas pesadas y bravas que surgen del gobierno, se les inventan operaciones, cosas pesadas", señaló Solanas y añadió que "este es un país peligroso. Estamos en un país en el que por 500 o mil pesos un sicario te pega un tiro simulando el robo de una billetera".

En respaldo al titular del bloque de legisladores de Proyecto Sur, el dirigente Humberto Tumini advirtió que el jefe de Gabinete "incita a la violencia" y afirmó que la presidenta Cristina Fernández "debe avalar habida cuenta de que lejos ha estado de mandarlo a callar".