El entrenador de Independiente, Jorge Almirón, aseguró ayer que la victoria en su primer clásico ante Racing 2-1 en el colmado Libertadores de América fue ‘una de las tardes más felices’ de su vida. “Me explota el corazón, no lo puedo creer, viví una de las tardes más felices de mi vida. No hicimos un buen partido, pero había que ganarlo como sea”, dijo el director técnico, luego del ajustado triunfo. Almirón luego le agradeció el apoyo al público que colmó el estadio y adelantó que espera que en las próximas fechas ‘se mantenga el equipo’, después de hacer variantes constantemente en las cinco fechas que lleva como conductor del conjunto Rojo. “Hay que disfrutar esto, pero tenemos que trabajar porque hay muchas cosas para mejorar. La gente de Independiente espera otra cosa, pero esta era una final y había que ganarla”, señaló el entrenador.

Por su parte, el defensor Cristian Tula sostuvo que con la victoria, el plantel de Independiente demostró que quieren ‘revertir la situación’, después del duro año que jugaron en la B Nacional. “Jugamos bien el primer tiempo y después en el segundo tratamos de aguantar para salir de contra. Los clásicos se ganan, este se disfruta más por la situación de la que veníamos”, añadió el exfutbolista de River Plate.