El Programa de Lucha contra las Adicciones Lihue ofrece en la actualidad distintas alternativas terapéuticas. Una de ellas fue inaugurada el año pasado: la internación; y en marzo de 2010 abrió la Modalidad Ambulatoria Simple, cuenta su director, Raúl Ontiveros.
Estas 2 modalidades están orientadas a ofrecer a cada persona y su familia el tratamiento adecuado para su situación, ofreciendo un abordaje personalizado.
El Ambulatorio simple permite a la persona mantener las áreas que su consumo no ha dañado, ya sea: estudio y trabajo, cuenta a modo de ejemplo.
Hay casos en que el consumo de drogas ha ido desarrollando un descontrol más generalizado, provocando un abandono de tareas escolares laborales y familiares, en que no es posible mantener una abstinencia. Para esos casos es necesario un abordaje residencial, es decir, que la persona resida en el lugar de su tratamiento, a lo que se le llama internación.
En Lihue abordan una Internación de alrededor de 3 meses con posibilidad a ampliarse en caso de no haberse logrado los objetivos. De ahí en más se continúa con una modalidad de ambulatorio intensivo, que consiste en volver a su casa (con pautas terapéuticas) y asistir a la Comunidad Terapéutica de lunes a viernes de 8 a 20.
Más adelante la persona inicia su Reinserción social, con actividades de estudio o trabajo, hasta finalizar el tratamiento.
En esta entidad hay disponibilidad de 8 camas ya que las autoridades evitan la sobrepoblación y hacinamiento; el tratamiento es personalizado profundizando el abordaje para cada persona asistida y su familia.
Además del abordaje de la persona adicta se trabaja con su grupo familiar (padres, hijos y hermanos) y su red (amigos, tíos, abuelos, vecinos, profesores. etc).