‘Ya hay personal de la Secretaría de Ambiente recorriendo los barrios de Rivadavia para buscar de dónde sale el mal olor‘, comentó ayer por la mañana el encargado de Gestión Ambiental de ese organismo, José Luis Espinoza. Así, el funcionario hizo referencia al caso de los 3 barrios de Rivadavia que sufren porque, cada unos 4 meses, la zona es invadida por un olor nauseabundo. Los vecinos no saben con exactitud cuál es su origen, aunque la versión más repetida es que emana de una finca de olivos de la zona.
Espinoza aseguró que nunca recibió denuncias por el olor que siente en los barrios Camus y Natania XV y el country El Huarpe, sino que se enteró del tema a través de la nota que fue publicada ayer por DIARIO DE CUYO. ‘Por lo que dice la nota, no se sabe de dónde sale olor. Por eso, la primera medida que tomamos es buscar su procedencia y si es necesario recorreremos la zona también por la noche, que es cuando dicen que el olor se hace más intenso. Después podremos tomar una decisión con la intención de mitigar el olor‘, comentó el funcionario.
En cuanto a la posibilidad de que provenga de una finca, dijo que ‘si es así obligaremos al dueño a enterrar el abono inmediatamente después de que lo recibe y no que lo deje desparramado. Así lograríamos que el olor no se expanda‘.
Mientras tanto, se sumaron a la denuncia vecinos del barrio CGT, que está ubicado detrás del Camus. Iván Correa comentó que ‘nosotros también sentimos olor. Viene de una finca que linda nuestro barrio y tiene plantaciones de ajo‘. Por su parte, Ariel Romero, que también vive allí comentó que ‘traen el guano en un camión y lo desparraman en montones por toda la finca, que se extiende desde la Central hasta la Libertador‘.
Según dijeron, ya se quejaron en reiteradas oportunidades en la Municipalidad de Rivadavia, pero no recibieron respuestas. ‘La única vez que alguien hizo algo fue cuando llamamos a la Policía Ecológica. Ellos vinieron y le cobraron una multa al encargado de la finca. Pero la pagó y siguió haciendo lo que hace siempre‘, dijo Romero.
