Al presentarse ante la Cámara de Diputados para exponer sobre la marcha del Gobierno nacional, el jefe de gabinete Aníbal Fernández afirmó ayer que "en estos años se han generado políticas públicas destinadas a la inclusión" social. Asimismo, aseguró que el tema de la seguridad "es muy complejo como para manosearlo".
"No se trata de mano dura o mano blanda", consideró el jefe de gabinete, al exponer ante los legisladores su informe, en el marco del artículo 101 de la Constitución Nacional, que señala que "el jefe de Ministros debe concurrir al Congreso al menos una vez por mes, alternativamente a cada una de sus Cámaras, para informar de la marcha del Gobierno". A su vez, consideró "innecesario" el proyecto aprobado en la Cámara de Diputados para combatir las llamadas "salideras" bancarias.
Cerca de las 15.45 empezó la exposición en la que el jefe de gabinete informó en torno a la situación económica, la política de seguridad, el índice de precios, pobreza y canje de la deuda pública, entre otras cuestiones.
Los bloques de diputados de la Coalición Cívica (CC), que lidera Elisa Carrió, y de Proyecto Sur, que conduce "Pino" Solanas, protagonizaron duros cruces verbales con el jefe de gabinete, cuando el funcionario brindaba el informe sobre la gestión en materia de seguridad y narcotráfico, y se retiraron del recinto.
El bloque de la CC resolvió retirarse cuando Fernández mencionó a una ONG que supuestamente brindaría informes sobre trata de personas contrarios al gobierno nacional y acusó personalmente de esa supuesta maniobra a la diputada carrioísta Fernanda Gil Lozano.
Luego de la retirada masiva de la CC del recinto, la bancada que lidera "Pino" Solanas se sumó a la retirada opositora cuando el diputado Eduardo Macaluse pidió a Fernández que rectificase lo que había dicho sobre la diputada Gil Lozano, reclamo que el funcionario se negó a realizar. Como consecuencia, los seguidores de Solanas se fueron del recinto.
La polémica comenzó cuando Fernández nombró a varios particulares, entre ellos a Fernando Mao y a Sara Torres, a quien el funcionario vinculó con la diputada de la Coalición Cívica Gil Lozano, al asegurar que esa mujer "es empleada" de la esa legisladora.
Luego del episodio, Fernández continuó con su informe y destacó los aumentos jubilatorios "dos veces al año", el incremento del presupuesto educativo, el aumento en gasto de salud; la implementación de la Asignación Universal por Hijo, así como la creación de más de 4,5 millones de puestos de trabajo desde 2003, entre otros logros del Gobierno nacional.
Ante una pregunta sobre el nivel de empleo en pymes formulada por el presidente del bloque radical, Oscar Aguad, Fernández aseguró que "no se ve caída ni pérdida de fuentes de trabajo en las pymes. En las empresas grandes es muy poco el personal para el nivel de riqueza que generan. En cambio en las pymes no es así, y eso se ve inmediatamente en las calles".
Por otro lado, aseguró que la orden de la Corte al gobierno santacruceño para reponer a un procurador "es de imposible cumplimiento". "No es el gobernador de Santa Cruz el que define cómo se elige un agente fiscal. Hay un procedimiento. Y lo de la Corte es una sentencia de imposible cumplimiento", enfatizó.
