Por unanimidad, la Cámara de Diputados aprobó ayer el proyecto de digesto jurídico, que consiste en un compendio ordenado de las leyes que realmente están en vigencia y se aplican en la provincia. En San Juan hay 8.256 normas y el objetivo es reducirlas a no más de 2.000, ya que la mayoría han quedado obsoletas o no se instrumentan. Tras una serie de reuniones entre Sergio Uñac, el presidente del recinto, y los legisladores, el proyecto contó con un fuerte respaldo y finalmente fue presentado por diputados de todos los bloques de la Legislatura, por lo que se descontaba su aprobación.
La propuesta de un digesto jurídico estuvo en la agenda de la anterior gestión legislativa y cobró un nuevo impulso durante la presidencia de Uñac. “De las leyes que hay actualmente, la idea que tenemos es que queden unas 1.500 y si no se puede, que no sean más de 2.000 las vigentes”, resaltó el vicegobernador. Es que de las 8.256 leyes, unas 6.256 (el 76 por ciento) están en desuso porque ya cumplieron con su cometido, algunas se superponen y otras se contradicen. Semejante cantidad de leyes inaplicables generó un desarreglo en el marco legislativo que dio origen a un ordenamiento jurídico. El digesto contendrá las normas que aún se aplican y están en vigencia, mientras que aquellas que no son operativas, no estarán incluidas y quedarán automáticamente derogadas.
Tras la sanción del proyecto, se creará una comisión especial que tendrá la tarea de llevar a cabo la depuración del padrón de normativas. El trabajo estará en manos de profesionales y estudiantes avanzados de carreras como abogacía, ciencias económicas e ingeniería. Los encargados del ordenamiento recibirán una capacitación de 2 meses y tras ese lapso, la comisión tendrá 1 año para elaborar el digesto, con la posibilidad de una prórroga de 6 meses.