La tranquilidad con la que declaró en la previa Luis Ardente fue la misma que demostró a la hora de defender ayer por primera vez en la temporada de Primera el arco de San Martín. Si bien ya había tenido su estreno el año pasado con el Verdinegro por la Copa Argentina, ayer debutó reemplazando al capitán, Luciano Pocrnjic, quien ya fue operado exitosamente de la fractura en el dedo índice de la mano derecha, y lo hizo de gran manera. El melenudo se mostró siempre confiable y más allá de algún rechazo defectuoso, en el resto de sus intervenciones siempre cumplió. Se notó que con su 1,87 es todo una garantía y aunque no tuvo que revolcarse por el área sanjuanina, aportó su grano de arena para dejar el arco verdinegro en cero. Algo importante teniendo en cuenta que de los cinco partidos que sumaba hasta ayer la era de Sava, sólo en el primero ante Godoy Cruz, en el triunfo 1-0, la valla de Pocrnjic había sufrido tantos. Sin dudas se trató de uno de los aspectos más rescatables de la excursión por tierras ‘tatengues’.
CONFORME
Ardente, quien será padre dentro de dos meses, en su análisis marcó que “el punto es bueno teniendo en cuenta que sumamos para acercarnos a los 50 puntos de objetivo y será todavía mejor si le ganamos a Newell’s la fecha que viene”. Luis reconoció que el encuentro estuvo lejos de ser entretenido y respecto de su labor fue más que claro: “Me sentí bien. Tranquilo de asumir esta responsabilidad y sabiendo que tenía el respaldo de todo el grupo. Creo que pese a que no me exigieron mucho, cumplí en las intervenciones que tuve. Por ahí lo único es que tengo un poco de bronca por el tema del tendón que me molestó para no estar a pleno”, expresó Ardente.