Guiada en la cancha por Lionel Messi y Alejandro Sabella en la dirección técnica, Argentina fue de los cabeza de serie el más "favorecido" pues tendrá en el Grupo F como rivales a Bosnia, Nigeria e Irán.

La Albiceleste ganó las Eliminatorias Sudamericanas de manera impecable. Sumó el 67% de los puntos en disputa: ganó 9 partidos, empató 5 y perdió 2. En la segunda fase encontró una importante regularidad y así clasificó a Brasil, donde buscará dejar atrás una sequía de 24 años sin meterse en semifinales.

El debut de Argentina será el domingo contra Bosnia, un combinado que a priori no genera alarma. En Europa, se quedó con su grupo (el G), relegando al segundo lugar a Grecia. De los diez encuentros que disputó: ganó 8, empató 1 y perdió 1. Demostró una importante capacidad ofensiva al marcar 30 goles, es decir con un promedio de 3 por juego. Será su debut en un Mundial.

Nigeria es un viejo conocido para la Argentina pues se lo enfrentó en varios de los últimos mundiales. Los africanos tuvieron que llegar a Brasil mediante el repechaje frente a Etiopía. Ganaron ambos partidos: 2-1 y 2-0. En la previa, son un peligro superior a Bosnia, aunque tampoco como para generar pánico ni nada por el estilo.

Irán es el otro país debutante en el grupo de Argentina. Dirigido por Carlos Queiroz apunta a tener una buena actuación. En las Eliminatorias asiáticas logró su boleto luego de superar en el repechaje a Maldivas. Cuenta con un preparador físico argentino como Diego Giacchino y es claramente el seleccionado más débil del grupo.