La primera víctima fue la hija de 12 años del gitano Esteban Yancovich (42) y Teresa Llanos (42). Luego de entrar y cerrar el portón de la calle para evitar testigos, sorprendieron a la niña en la sala de estar de la casa y la llevaron hasta la habitación de sus padres amenazándola con un arma, tomándola del cuello y golpeándola. La versión de una familiar de las víctimas es que al ver esa escena, el dueño de casa dijo que les entregaría todo pero que los delincuentes no pararon: aún con el dinero en mano -dijo- lo golpearon hasta provocarle un corte, le metieron un arma en la boca y le gatillaron dos veces para simular que lo fusilarían. Los golpes también fueron la modalidad usada para reducir a su mujer y también a un hijo de 16 años del matrimonio y a su pareja de 19, que estaban en otra habitación. Según la familiar, los mismos ladrones se encargaron de aclararle a Yancovich que no se trataba de un golpe al voleo porque iban a buscar la plata del auto que había vendido el día sábado: ‘te batieron gitano, danos la plata’, habrían dicho.
Cuando todo finalizó, las cinco víctimas quedaron atadas y envueltas en una crisis de nervios, mientras los delincuentes salían caminando como vinieron, ‘tranquilamente’, para no despertar sospechas entre los vecinos, y con unos 55.000 pesos en efectivo, casi 5.000 más en cheques y joyas de oro, informó la Policía.
Todo pasó alrededor de las 20,30 de ayer en la casa que Yancovich comparte con su familia en calle Cano al 224 Este, en Rawson. Allí también el hombre tiene varios vehículos para vender, porque a eso se dedica, dijeron.
Efectivos de la seccional 3ra. intentaban anoche conseguir una versión detallada de las víctimas para poder avanzar en la investigación. Así, por ejemplo, buscaban al comprador de un auto (sería un Ford Fiesta) para averiguar si existió o no un nexo con los ladrones. Y sobre todo la mayor cantidad de datos posibles sobre los asaltantes, pues atacaron a cara descubierta y por eso no descartaban que fueran de otra provincia.