Un obrero de 57 años murió ayer a las 4.10 en el Hospital Guillermo Rawson, cuatro horas después de haber sido arrollado por el conductor de una camioneta Rastrojero. Según la Policía, el accidente que costó la vida Rafael ‘Cacho’ Caballero ocurrió alrededor de las 23.40 del sábado en calle Mendoza, unos 300 metros al Norte de la casa de la Escuela Batalla de Tucumán (casi en el cruce con Calle 17, en Campo de Batalla), donde vivía con su señora, hermana del portero casero de ese colegio.
El caso es investigado por policías de la Seccional 7ma al mando del comisario inspector José Jacinto Ortiz, y ayer aparecía envuelto en una polémica: el chofer de la Rastrojero, identificado como Ceferino Nicolás Tapia (37) habría dicho que circulaba hacia el Norte por Mendoza cuando vio en sentido contrario un micro de la línea 24 de la firma Nuevo Sur, que lo encandiló con un cambio de luces. Y que cuando bajó la luz se topó con la víctima tirada en el piso, frenó, pero siguió derecho porque no tenía cómo escapar pues a su izquierda estaba el micro y a la derecha un eucalipto.
Esa explicación no encaja con los dichos de algunos testigos. Ayer, Darío Quiroga, vecino de Caballero, aseguró que un policía y otra vecina que venían en el colectivo vieron a Caballero caminando rumbo al Norte y no tendido en la calle. Y estaban indignados con la actitud de Tapia, porque luego del impacto se fue. En la Policía, precisaron que Tapia (con domicilio en Villa Pons, en Carpintería, Pocito) efectivamente se marchó, pero luego se entregó. Ayer estaba detenido.
