Buena parte de las economías regionales del país se verían beneficiadas con un fuerte incremento de mano de obra -estiman que serían más 15.600 empleos adicionales- en el caso de que se aprobara el proyecto de ley que incentiva el uso de jugos de uva y otras frutas en reemplazo de la fructosa de maíz. Así lo determina un estudio elaborado por Ubatec, entidad constituida por la Universidad de Buenos Aires pero que también participa el gobierno de la Ciudad, la Unión Industrial Argentina y la Confederación General de la Industria. Ese estudio académico será presentado hoy a las 9,30, en la sala 2 del segundo piso, en el Centro Cívico; y se denomina “Impacto Económico y Social en el mercado argentino de jugo de frutas ante cambio en impuestos internos”. De este modo, la Coviar suma otro actor al apoyo para impulsar la sanción de la llamada ‘Ley del Mosto’’, la cual propone modificar impuestos internos para desincentivar la incorporación de la fructosa de maíz para endulzar gaseosas. Esa medida viene siendo impulsada desde hace un par de años en el Congreso, pero aún cuenta con la oposición de varios sectores.
Empleos nuevos
El resultado principal de la investigación académica es el de la creación de fuentes laborales. Según Ubatec, el proyecto de ley permitiría crear en el sector azucarero más de 1.200 empleos, al aumentarse el ‘piso‘ de utilización de azúcar por parte de las gaseosas y las aguas saborizadas. El sector vitivinícola es el que más se vería beneficiado por la creación de alrededor de 8.800 nuevos puestos de trabajo al incorporarse como endulzante. Además por la utilización de otras frutas como saborizantes (manzanas, limones, peras, etc) se crearían aproximadamente 500 puestos de trabajo. Finalmente a nivel global adicional de toda la economía, se generarían cerca de 4.900 puestos de trabajo adicionales debido a los encadenamientos hacia delante y hacia atrás de los principales sectores productivos involucrados -gaseosas y aguas saborizadas, azúcar, molienda de maíz y frutas-. ‘En total el efecto sería de 15.600 empleos adicionales con la sanción de la ley’’, dice el estudio.
En el caso del Jarabe de Maíz de Alta Fructuosa (JUMAR), Ubatec considera que su menor utilización prácticamente no repercutiría en el nivel de empleo ya que es uno de los subproductos de la molienda húmeda, y por lo tanto difícilmente se modifique la cantidad de toneladas totales de maíz molturadas, ya que las mismas se requieren en el proceso para producir todos los demás productos. Al tratarse, como se sabe, de un sector industrial capital intensivo, no tendría incentivos a modificar su planta de personal, estimada en 2.000 personas.
Tampoco se estipulan modificaciones en el empleo del sector gaseosas y aguas ya que este sector ocupa entre 10.000 y 13.000 personas en todo el país, de las cuales se estima que entre 7.000 y 8.000 atienden a la distribución de las mismas y su acceso a los puntos de venta minorista. ‘’Su demanda consolidada no se vería modificada y podría recurrir a distintas alternativas marcarias o de cambios en los atractivos comerciales de sus productos, como para recuperarse de una eventual caída en el valor agregado en el rubro más importante’’, dice el informe.
Asimismo, la investigación tiene varias conclusiones más, como el impacto en la demanda de bebidas analcohólicas en Argentina, ante posibles modificaciones en impuestos internos; el posible impacto en la demanda de edulcorantes y jugos naturales (durazno, lima, limón, mandarina, manzana, naranja, pera, pomelo y uva); y finalmente el estudio muestra los resultados de investigaciones científicas sobre la utilización de edulcorantes y jugos, y sus efectos en la salud de los consumidores.
