La investigación para dar con uno de los sospechosos de matar de cuatro tiros a Alejandro ‘Carasucia’ Alvarez el domingo en la madrugada en Villa Dorrego, Chimbas, derivó ayer en seis allanamientos, uno de los cuales terminó con la detención de Matías Chávez (26) un supuesto cómplice del presunto homicida buscado, Emiliano ‘Pastelito’ Sosa.

Chávez cayó porque en su casa de Oro y Catriel, Chimbas, tenía un revólver calibre 22 con 8 cartuchos, otro calibre 32 con 5 cartuchos y un rifle calibre 22, además de una guitarra y un saxo marca Júpiter cuya procedencia no pudo justificar, dijeron fuentes policiales.

El sospechoso apresado fue identificado como Matías Chávez (26) y ahora enfrentará cargos por tenencia ilegal de armas y por su posible vinculación al supuesto robo de los instrumentos musicales, dijeron fuentes policiales.

La captura de Chávez fue el resultado de un allanamiento conjunto realizado por pesquisas de Robos y Hurtos al mando del comisario inspector Carlos Castillo y los de Homicidios comandados por el comisario Carlos Avellá. Llegaron a la casa del detenido porque sospechaban que escondía armas que serían de los ‘Pastelito’ y las usarían para sus enfrentamientos con otro grupo rival, dijeron ayer.

Alvarez fue ultimado de cuatro tiros el domingo minutos antes de las 5, cuando arribó a la Villa Dorrego con un chico de 17 años a bordo de una moto Honda Wave 110cc., que había sido robada a punta de arma a un joven en Albardón.

La misma noche del domingo un chico de 15 años se entregó en Homicidios con una pistola calibre 11.25 y la versión de que había participado en el crimen. Pero los pesquisas y la propia familia del fallecido creen que la entrega del menor es una estrategia para hacer zafar a sus tíos Matías (detenido el lunes en Rawson) y Emiliano Sosa (aún prófugo), a quienes apuntan como autores del crimen.

En la Policía están convencidos de que a Alvarez lo mataron por venganza, pero la familia del fallecido creen que lo asesinaron por error al confundirlo con otro.