Tiene 17 años y en la noche del martes se llevó el susto de su vida cuando un grupo de sujetos a bordo de un remís les dispararon a él y sus amigos en el interior de un barrio de Concepción, en Capital. Afortunadamente, ninguno de los proyectiles fue letal, aunque uno fue bastante dañino: le perforó el brazo izquierdo y ahora la movilidad de dos dedos de su mano está comprometida, dijeron sus familiares. En la policía sospechan que los motivos del ataque fueron por un ajuste de cuentas, informaron fuentes policiales.

El salvaje ataque contra el adolescente (no se identifica por cuestiones legales) ocurrió el martes a eso de las 23 en la calle Mary O"Graham, antes de Tucumán, en el barrio Cabot, en Concepción, Capital, contó María Alaniz, abuela del herido. Unos minutos antes de la balacera, el chico se había juntado con dos amigos en la vereda de una vivienda cercana a fumar un cigarro y charlar, relató la mujer.

En eso estaban cuando un remís con 4 ocupantes se detuvo frente a ellos. Ahí fue cuando los jóvenes vieron salir el cañón de un arma desde una ventanilla, aseguró Alaniz. Sin mediar palabras, uno de los desconocidos disparó dos veces contra los muchachos. Los jovencitos salieron corriendo para refugiarse de las balas, pero el chico de 17 años fue alcanzado en el antebrazo izquierdo por un proyectil, comentó abuela del adolescente. Ese fue el momento en que los atacantes huyeron a bordo del auto.

Más tarde, trasladaron al adolescente al hospital Rawson para que lo atendieran. Los médicos determinaron que el balazo le había atravesado el brazo y, además, fracturado el hueso del radio, dijeron en la policía. Luego de un examen más exhaustivo, los profesionales también detectaron que la bala había rozado un tendón. Esa lesión ahora puede dejarlo sin la movilidad de dos dedos de la mano, comentaron ayer los familiares del herido.

"Yo sé quiénes son estos tipos, tengo sus nombres. Son unos cuerpos sin alma, unos delincuentes de la zona que se dedican a amenazar a todo el mundo. Agradezcan que no le pasó algo más grave a mi nieto sino no sé qué hubiera hecho", señaló molesta María Alaniz.

Anoche, en la comisaría 2da. no descartaban que el ataque haya sido por una venganza, debido que todavía no se había realizado ninguna denuncia por parte de la víctima, informaron en la policía.