Boca empató con Newell’s, que sigue invicto, 0-0, en el partido saliente de la 15ta fecha de torneo Inicial. El Xeneize quedó a ocho puntos del líder, Vélez, cuando restan cuatro partidos por jugarse y entre ellos debe visitarlo el domingo. En tanto la Lepra, está a tres unidades del Fortín.

Empezó mejor Boca en el arranque del encuentro con el argumento de presionar en el medio para recuperar rápido la pelota y llevarle peligro al arco rosarino. A los 5, hubo un taco de Santiago Silva que provocó el disparo de Guillermo Fernández, que sacó al córner Nahuel Guzmán. Cinco minutos más tarde hubo un penal por mano de Gabriel Heinze que cortó un avance de Lautaro Acosta, que el árbitro Mauro Vigliano no cobró. A los 16. hubo otro penal, ahora de Matías Caruzzo, que tomó en el área a Ignacio Scocco, pero tampoco éste tuvo sanción. A partir de ahí el encuentro ‘cayó en un pozo‘. Pero a los 30’ sacudió la ‘modorra’ Guillermo Fernández cuando metió un tiro solo por arriba del travesaño y ocho minutos más tarde el juvenil sacó un zurdazo y desvió a un costado Guzmán. Sobre el final de la etapa hubo una chance para cada uno: primero el local con derechazo de Paredes, en el área, que tapó el arquero con un pie y luego para Newell‘s con un desborde de Maximiliano Rodríguez para Pablo Pérez, quien enganchó mal la pelota desde buena posición.

En el segundo tiempo Boca decayó y Newell‘s dominó el partido y creó las mejores situaciones. Mientras que el local volvió a parecer el de los últimos encuentros con poco fútbol y sin ideas en ofensiva. Las oportunidades de gol fueron todas de Newell‘s: 11m. un excelente pase de Pablo Pérez para Mauricio Sperdutti, que tocó por arriba de Agustín Orión, pero la pelota cayó en el techo del arco; a los 20m. con un tiro de Scocco que atajó Orión y a los 22m. con un centro de Cáceres para el remate de Fabián Muñoz desviado. Pero la más clara estuvo sobre el final del partido: corrida de Maximiliano Urruti, que definió ante Orión y cuando la pelota ingresaba en el arco Franco Sosa la sacó en la línea. La gente de Boca hizo saber su descontento y cuando se retiraba el entrenador Julio Falcioni empezó a gritar por Juan Román Riquelme, mientras que la barra solo entonaba ‘Dale Boca‘.