Con el traje de neopreno puesto, grandes linternas, el tanque de oxígeno lleno y solo con mucha experiencia a cuestas, algunos aventureros se zambullen en las inundadas galerías de una mina de plata sueca para realizar lo que se conoce como espeleobuceo. Esta ex mina de plata llamada Sala Silvermine, se ha transformado en un polo de atracción para los turistas. Esto se debe a que hace un par de años, el lugar se convirtió en un parque temático minero, que brinda la posibilidad de sumergirse en las inundadas galerías de la mina. Esta actividad está solo reservada para los expertos es buceo de cueva, ya que la superficie del agua está situada a 155 metros bajo tierra, resultando en más de 160 metros de profundidad en la parte más recóndita de la mina. Los que lo conocen dicen que es un lugar “misteriosamente hermoso” ya que no existe luz natural que llegue hasta dicha profundidad. Es por ello que todas las tareas de buceo deben realizarse con luz artificial submarina obligatoriamente.
La mina de plata de Sala Silvermine está situada en el corazón de Suecia, a 120 kilómetros de Estocolmo, y es propiedad de la empresa SilverMine AB. Esta compañía posee también los terrenos alrededor de la mina y maneja las visitas turísticas y todas las actividades que se realizan allí. La antigua mina existe desde épocas medievales, y estuvo en funcionamiento hasta 1908. La plata era muy importante para la economía de Suecia en ese entonces y era la base para la producción de monedas. Un total de 400 toneladas métricas de plata y 40.000 toneladas de plomo fueron extraídas del actual parque temático; a un ritmo de 3 a 5 toneladas de plata por año. La mina alcanzó eventualmente una profundidad de 300 metros (lo equivalente a seis veces la altura del campanil de la Catedral de San Juan), y una longitud total de 20 kilómetros (lo equivalente a la distancia que existe entre la Ciudad de San Juan y el Dique de Ullum).
Luego de la obtención de los permisos y las habilitaciones legales pertinentes, a partir de enero de 2007, el yacimiento fue abierto para prácticas de buceo con equipo autónomo. Según el grupo de buzos expertos que ha trabajado para hacer posible este sitio de buceo, dicen que el interior de dicha mina es uno de los ambientes más espectaculares para buceo en cuevas del mundo, pero también uno de los más exigentes.
La experiencia solo se ofrece para expertos en cuevas y de aguas abiertas muy experimentados, puesto que parte del sistema tiene acceso continuo a la superficie y las visitas en grupos mínimos están dirigidas siempre por un guía contratado por la empresa. Desde su inicio se han ido formado diferentes grupos de buceadores expertos en aguas abiertas que han visitado la mina tras un “reciclaje” por parte de los buzos-guía del complejo para facilitar y favorecer la actividad en dicha zona.
El espeleobuceo o (cave diving) está considerado uno de los deportes de mayor riesgo que existen actualmente en el mundo. Según afirman los comentarios de la página web de la empresa que promueve el buceo en la mina: “a muchas personas les cuesta sentirse seguros con un simple snorkel en la boca y con el cuerpo apenas sumergido en el agua unos centímetros. Por lo tanto, no se imaginan siquiera la sensación que puede provocar sumergirse en lo más hondo, de lo más profundo de una antigua mina inundada”.
