Dicen que iban apurados porque debían pagar la luz y hacer otro trámite. Eran las 12.30 y tenían los minutos contados para llegar en su moto hasta el centro de Media Agua, entonces Hugo encaró por ese camino de tierra y quiso pasar al camión que a esa hora iba regando. Quizás fue el propio ripio o el barro, pero el obrero rural relató que en ese momento ‘la moto se me corrió‘. Después, sólo recuerda que su esposa y él cayeron al suelo y acabaron bajo el chasis del vehículo pesado. Ese sería el final para ella, que fue aplastada por las ruedas traseras de ese rodado, mientras que Hugo se salvó porque alcanzó a sacar la cabeza a tiempo. La tragedia tuvo lugar en una zona rural de Sarmiento y ocurrió en menos de 24 horas de otro accidente fatal registrado en 9 de Julio, también protagonizados por una moto y un camión.

La fallecida de ayer fue Marta Alejandra Brizuela (32), quien era madre de tres chicos y trabajaba como secretaria del Aprosar (Asociación de Productores y Productoras Rurales de Sarmiento).

Ella y su marido, Hugo Heredia (37), habían salido ayer al mediodía en una Motomel 110cc de su casa en el barrio La Laguna para dirigirse a Villa Media Agua. El trayecto es de 6 kilómetros hasta el centro y querían llegar rápido antes del cierre del comercio. Hugo debía pagar el servicio de energía eléctrica porque estaban por cortarle el suministro y Marta tenía que hacer unos papeles para enviar un cargamento de melones, dijo un pariente de la pareja. Sin embargo, no llegaron a recorrer más de un kilómetro de su casa que sufrieron un terrible percance. Cuando transitaban por calle Buffano, al Norte de Yacante, se encontraron con el camión cisterna Volkswagen (contratado por Vialidad Provincial) que era guiado por Miguel Alejandro Ortega (52) y que iba regando ese camino de tierra, señalaron en la Seccional 8va. Los vehículos circulaban en la misma dirección. Hugo Heredia entonces quiso rebasar por un costado al vehículo pesado y en esa maniobra ‘la moto se me corrió‘, reconoció él mismo. Para mala suerte de ellos, perdieron la estabilidad a bordo del pequeño rodado y fueron a parar debajo del camión. ‘Yo saqué la cabeza y me tiré para un costado’, relató Hugo, que era el único que llevaba casco. Marta Brizuela, su mujer, corrió la peor de las desgracias al ser aprisionada por las ruedas traseras del Volkswagen.