No siempre las copias son truchas. Si bien no superan al original, están a pocos metros y se amparan como "igualita". Eso impera en la fachada de Dany Couchot, "el primer imitador del país de Ricardo Arjona y el más reconocido por el fan club oficial", asumirá luego el porteño que el viernes 16 se presentó en Hugo, que además prepara su regreso en Septiembre -sin fecha confirmada-, se encuentra promocionando su tercer disco "Más íntimo que nunca" (que comprime un mix de clásicos y 3 canciones propias) y charló con DIARIO DE CUYO.
Misma altura, mismo timbre de voz, mismo look "porque los fanáticos son muy detallistas", facciones similares -casi el reflejo de su espejo- y claro, su porte de romántico rebelde y aprisionado en "historias de taxi". Con cigarrillo en mano, sentado en un banco de la Plaza 25 de Mayo y rodeado por alguno que otro aledaño confuso (varios locales se preguntaron si era o no era el mismísimo Arjona), Dany reposó sobre su fama prestada -y ganada- y describió su tributo móvil, ese que lo traslada a "todo tipo de eventos" -léase diversos conciertos nacionales y fiestas privadas- y logra espontánea "aceptación" de fans.
"Hace 4 años que vengo a San Juan y estoy feliz por la repercusión", relató con notable entusiasmo el cantante que hace 8 años corporiza a Arjona, hace 5 que canta en los veranos de San Bernardo y que gestó su oficio a partir del clásico "Mujeres".
"La escuché en la radio allá por el "95 cuando todavía no era muy conocido. Después descubrí su poesía callejera y me pegó esto de que parece que te canta a vos. Más allá de algunas metáforas enroscadas, me encontré con un tipo que se emparentaba conmigo", contó Couchot y remarcando que a la hora de interpretar sus canciones estudia sus poses, utiliza la réplica de su indumentaria y está "al tanto de todo".
"Soy muy autocrítico y trato de averiguar qué le gusta a la gente y qué no. Nunca se me escapa nada porque me considero muy profesional", remarcó el eco del autor de "Dime que no" (que -dice- de "imitador" pasó a ser el "Dany Couchot que canta las canciones de Arjona").
"Al principio tenía dudas de si lo hacía bien o no, pero la misma gente me dio seguridad", explicó el "aprendiz de cantautor" que incluyó en su último disco algunas melodías personales como "Viviendo al revés" -"como vivo mi vida", tiró-, que hace 20 años atrás era bajista del grupo "Menta Cristal" (cumbieros melosos) y que compartió varios momentos con el mismísimo Arjona.
"Soy parte del fan club oficial y lo conocí por primera vez gracias a ellos en el "97 y cuando Ricardo estaba hospedado en el Sheraton. Me acuerdo que se sorprendió por mi timbre, muy parecido al suyo", detalló con orgullo. Esa reconocida equivalencia concretó su "máximo anhelo" cuatro años más tarde, cuando Couchot fue a verlo en 2001 al Gran Rex, logró saludarlo nuevamente y -bendición celestial de por medio- terminó cantando con él "Mujeres" -paradójicamente la semilla de todo-. Su destino suertudo también lo llevó a participar en 2006 como su doble en el video de "Minutos" (en la cárcel de Caseros), a escuchar la complaciente "aprobación" de su "maestro" y hasta disfrutar de una posterior -e increíble- presencia de Arjona en una "reunión de amigos" -como describe Couchot a sus shows-. ¿Cómo vive el asedio de las chicas? "Con respeto, porque la gente es la que te sube o te baja", aseguró el músico que vive de esto "cómodamente", presume "casi cuatro décadas", acumuló "todos los estados civiles" y promete a futuro una carrera de puño y letra.
El calco más fidedigno de Arjona bien puede esquivar la frase "De Guatemala a guate peor". Al menos, resulta la mejor manera -y económica- de tenerlo cerca.