A propuesta del rector Benjamín Kuchen, la Universidad Nacional de San Juan podría dejar de usar las tradicionales palabras con que juran el título sus egresados. Es más, hasta dejaría de jurarse si es que se aprueba. En cambio, según el expediente iniciado a fines de junio de este año, la nueva fórmula sería la de un compromiso de los graduados respecto de sus conocimientos, desligada de toda manifestación religiosa. La iniciativa ya fue vista por Asuntos Legales y tratada en el Consejo Superior. Por estos días toda persona interesada -esté vinculada o no a la universidad- puede opinar si es conveniente o no este cambio de fórmula que incluirá no sólo a los graduados de carreras universitarias sino también a los de los secundarios que dependen de la UNSJ.
Hasta ahora las fórmulas que se utilizaban en el acto de Colación de esta casa de estudios, estaban fijadas por una ordenanza interna del año 1979. Así, quienes habían rendido todas las materias, aprobado la tesis y cumplimentado una serie de requisitos juraban su título, pudiendo elegir según su criterio, por "Dios, la Patria, y estos Santos Evangelios", por "Dios, la Patria y mi honor" ó por "la Patria y mi honor". Sin embargo, ante algunos planteos particulares, en más de una ocasión las autoridades debieron adaptar los enunciados preestablecidos. Por ejemplo, en Ingienería, dicen las autoridades, es muy común que esto pase.
Mientras que para el rector, las fórmulas resultan anacrónicas y se basan en una tradición meramente lingüística y cultural que expresan una exteriorización de una creencia religiosa o una negación que es del ámbito privado y personal, para la vice rectora "este texto por ejemplo no contempla los distintos credos e inclusive aquellos egresados que justamente por cuestiones religiosas no pueden jurar. La propuesta garantiza el derecho a la Libertad de Culto y se vincula más con lo académico y la ética profesional", explica Nelly Filippa que argumenta que la nueva fórmula condice con la Constitución Nacional.
Por eso, la propuesta es la de un compromiso del nuevo profesional con la sociedad de la que forman parte.
La propuesta de Kuchen no está desligada a otros hechos similares en otras universidades. De hecho, en la de Córdoba y la del Litoral ya se incluyeron fórmulas "más abiertas".