“Olé, Olá, no es Cristina ni Alfonsín, es Hermes Binner conduciendo el país”, gritaron los miles de dirigentes y militantes que ayer se lucieron, con cantos y aplausos acompañando a Binner. Se vio a un Binner descontracturado, que hasta bromeó con la denominación del espacio conformado. “Todavía no le pusimos el nombre, decimos Frente Progresista… pero no sé”, deslizó el santafesino mirando con ingenuidad a sus socios sentados en primera fila. Otra de las perlitas fue el canto dirigido a sus ex socios del radicalismo: “Hay que saltar, hay que saltar, el que no salta es radical”, gritaron y el piso del salón tembló.
