Richard Dante Lozano (44) sumó una cuarta condena a su historial delictivo: ahora, el juez Raúl José Iglesias (Sala I, Cámara Penal) lo condenó a 5 años de cárcel por su vinculación a la sustracción de 9 motos de un local comercial en pleno centro y a la portación ilegal de un arma de guerra, una pistola 9 mm que había sido robada a un oficial de policía, dijeron fuentes judiciales.

Durante los alegatos, el fiscal de Cámara Penal Gustavo Manini había pedido 8 años de cárcel. Entendió que cabía aplicarle esa pena porque se probó que Lozano fue uno de los que entró sin forzar puerta alguna a Mauri Motos, en Rawson al 110 Sur, Capital, el 23 de octubre de 2011. Lo acusó porque reparaba el techo de un departamento sobre el local comercial, porque tenía llaves del lugar y porque testigos vieron una combi blanca como la suya cuando cargaron las 9 motos. Ese día del comercio sustrajeron también un CPU y $300.

Otra prueba para el fiscal, fue el hecho de que el 2 de mayo de 2012 en Villa Saffe, Capital, Lozano fuera sorprendido a bordo de una de las motos hurtadas, una Guerrero 110cc y que en su poder tuviera la 9mm con 12 cartuchos que le habían robado al oficial Gilberto Olivares luego de forzarle una puerta de su auto, el 15 de octubre de 2011 en Rioja y Mariano Moreno, Capital. Por esa razón Manini lo acusó por portación ilegal de un arma de guerra y encubrimiento.

Diametralmente opuesta fue la posición del mismo Lozano y su defensor César Jofré, quien pidió su absolución. El acusado negó tener vinculación con la sustracción de las motos y dijo que su arresto fue una ‘cama’ que le hizo la Policía, ya que aquel 2 de mayo sólo pasaba por el lugar para hacer unas compras cuando lo apresaron. Ahora, Jofré podría pedir la revisión del fallo ante la Corte de Justicia.

Lozano registra una condena de 5 años y 10 meses en 1998; otra de 1 año en el año 2000, una pena unificada de ambos castigos de 6 años y 6 meses dictada en 2001. Y una tercera condena de 6 años y 6 meses de cárcel por otro hecho delictivo (la mayoría por delitos contra la propiedad) que le aplicaron en febrero de 2006. También se lo vinculó al balazo contra ‘Loco’ Esbry, un conocido barrabrava de Sportivo Desamparados que sufría diabetes y murió a causa de esa herida.