Sus 1,80 metros de estatura imponen respeto. Al escuchar su voz se delata la tonada charrúa clásica y el tono también genera cierto poder de intimidación. Se trata de Pablo Rodrigo Melo, quien ayer estampó la firma en el contrato que lo unirá con San Martín por la próxima temporada. Así, se convirtió en el segundo uruguayo del plantel (el otro es Gerardo Acosta) y sin dudas será un defensor que es llamado a ser un referente, dentro y fuera de la cancha. Por experiencia y presencia. Es un jugador que como dijo uno de los dirigentes más importantes del club "viene a ponerse la camiseta y jugar". Melo, quien integró la selección sub 20 de su país, afirmó que busca la gloria en Concepción y que el fútbol de nuestro país es super competitivo. Y dejó en claro su capacidad de adaptación para los distintos puestos en la zaga central, ya sea con el sistema de tres o cuatro futbolistas, tal cual es la idea primaria del técnico Darío Franco.
"Me siento muy contento de haber podido llegar nuevamente al fútbol argentino. Cuando comenzaron las negociaciones con San Martín, la idea me encantó de entrada. Espero poder serle útil tanto al cuerpo técnico como a los dirigentes", expresó Melo de 28 años y quien llega con el pase en su poder.
En su curriculum, Pablo tiene siete clubes y siempre en varios de ellos se caracterizó por ser un referente: "Es interesante ser un líder del equipo. Son desafíos lindos de tomar. Claro que por el tema de ser defensor uno como que tiene la obligación de llevar el equipo adelante, ya sea con la marca o a veces con una palabra de aliento. Aunque no hay que olvidarse que esto es un juego de equipo y somos once los que entramos a la cancha. Mientras todos estemos en buen nivel, lo demás es secundario", afirmó.
Sobre la legendaria garra de su Uruguay natal, Pablo dejó su impresión personal, la cual cambió en la etapa contemporánea. "Creo que al fútbol ya no se juega sólo con la garra o con el buen fútbol. Acá esto es una mezcla de las dos cosas. Pienso que en este Mundial quedó claro que el fútbol uruguayo no es sólo fuerza o pegar. Se demostró que podemos jugar, y también meter cuando es necesario", resaltó.
La pasada campaña para San Martín derivó en una gran frustración tras no conseguir el ascenso a Primera y Melo, más allá que dijo que debe interiorizarse bien del club en estos días, sabe dónde llega: "San Martín es un grande y por eso buscará el ascenso. Sé que hace tres años estuvo en Primera y la idea es venir a sumar para devolverlo a ese lugar. Yo tuve la chance de jugar con Tiro Federal en Primera y más allá que en lo personal el saldo fue positivo, en lo grupal no tanto porque descendimos. Ahora la idea es llevar a San Martín donde se merece", enfatizó.
En el aspecto netamente táctico del equipo, el defensor comentó sobre sus preferencias que "en los diez años de Primera que tengo, la mayoría de las veces jugué con el sistema de tres defensores y en ese caso lo hice de líbero. Pero cuando se dio la oportunidad de hacerlo con cuatro en el fondo, me fue indistinto ser primero o segundo central. Me adapto a las dos posiciones".
