La investigación de Miguel Suraty y Teresa Infante podría terminar en un proceso Penal que sería el segundo que se desprende de la megacausa de las expropiaciones. El primero apunta a Santiago Graffigna y es impulsado por algunos de sus antiguos clientes en juicios de expropiaciones por una presunta estafa.
El caso también está en manos de la titular del Juzgado de Instrucción Nº 5, María Inés Rosselot, quien investiga si Graffigna se quedó con plata que les correspondía a sus viejos clientes. El letrado está procesado y al inicio del trámite judicial, en el año 2011, permaneció detenido en la Central de Policía.
En la causa también estaba apuntado el abogado y exsocio de Graffigna, el abogado Horacio Alday. La Justicia dictó en su caso falta de mérito, aunque sigue bajo investigación.