Dirigentes agropecuarios y funcionarios nacionales y santafesinos celebraron ayer el centenario del ‘Grito de Alcorta‘, que recuerda el primer paro agrario del país, en medio de la tensa relación entre el gobierno y el campo, que quedó expuesta en los abucheos que recibió el secretario de Agricultura, Lorenzo Basso.

Basso fue el representante de mayor rango del gobierno nacional que participó de la ceremonia central realizada ayer por la tarde en la localidad santafecina de Alcorta, y fue objeto de abucheos por parte de los asistentes. El titular de la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, en su discurso aludió al ‘profundo distanciamiento‘ que existe entre el campo y el Gobierno nacional desde 2008, a raíz del conflicto por la resolución 125 que fijaba retenciones móviles a las exportaciones de granos. Buzzi fustigó el actual modelo productivo por entender que favorece a las grandes corporaciones en detrimento de los pequeños productores y advirtió que ‘de ser necesario, vamos a iniciar una nueva huelga agraria, como en 1912‘ porque a cien años de esa rebelión de chacareros ‘estamos peor‘. En este sentido, enfatizó que ‘a cien años del Grito de Alcorta, se da la paradoja de que las grandes multinacionales se quedan con nuestros campos en las mismas zonas en las que se parió aquella huelga.