La presidenta Cristina Fernández arribó ayer por la mañana a la ciudad de Shangai, la capital financiera de China, y subrayó que la gira por el gigante asiático va "muy pero muy bien" y que "estamos muy satisfechos" por el resultado.

Frente al fracaso hasta el momento de la delegación argentina de destrabar el conflicto por el aceite de soja, la jefa de Estado sostuvo que "el balance de la visita a Pekín es más que bueno, para nosotros y para China" y destacó los acuerdos firmados, ya que "muestran que las cosas van muy pero muy bien, para nosotros y para ellos".

La mandataria aterrizó en Shangai a bordo del avión oficial Tango 01 a las 19.30 hora local (8.30 de la Argentina), para desarrollar desde hoy la actividad oficial, en lo que será el último día de permanencia en el gigante asiático. Antes de emprender el vuelo desde Pekín, la mandataria reiteró que ambas naciones "son complementarias" en lo comercial, según difundió el sitio oficial del Gobierno, sobre declaraciones realizadas luego de entrevistarse con el presidente de la Conferencia Consultiva Política, Jia Quingling.

"Para nosotros esta visita ha sido muy buena, más que buena, estoy muy contenta. En Shanghai vamos a conocer el pabellón que tiene allí la Argentina, que ha recibido a más de un millón de personas, por lo que ha tenido mucho éxito y es parte importante de esta feria internacional", resaltó Fernández de Kirchner".