En Chile se cumplió el último domingo una nueva etapa constitucional para renovar la Presidencia de la nación y la integración parlamentaria, entre otras autoridades, sin ninguna sorpresa que no hayan adelantado los pronósticos electorales. La apática jornada comicial fue protagonizada por los propios electores, que por la opción del voto voluntario, sólo concurrió a las urnas el 48,8% del padrón.

Tampoco sorprendieron los resultados con el triunfo de la expresidenta y candidata opositora de centroizquierda, Michelle Bachelet, seguida por la oficialista de derecha Evelyn Matthei, quienes deberán dirimir en una segunda vuelta, el 15 de diciembre, quien reemplazará a Sebastián Piñera a partir del 11 de marzo próximo en el Palacio de la Moneda. De acuerdo a los porcentajes obtenidos por ambas candidatas, 46,69% y 25,01% de los votos, respectivamente, todo indica que Bachelet será quien recibirá en el balotaje la legitimidad de la ciudadanía transandina para ir al Palacio de la Moneda.

Las expectativas de este lado de la cordillera, y en particular de San Juan, son optimistas tanto por la continuidad de las relaciones diplomáticas dado el entendimiento positivo para encarar obras trascendentes como para el desarrollo conjunto de emprendimientos económicos. La exmandataria chilena se interesó siempre por el Paso de Agua Negra, desde el primer momento en que el gobernador José L. Gioja le expuso la viabilidad de construir un túnel de altura para mantener una comunicación permanente de beneficios económicos mutuos y proyección regional, una gestión que se consolidaría en oportunidad de celebrarse el encuentro de la Unasur en San Carlos de Bariloche, en 2009, entre los presidentes Cristina Fernández de Kirchner, Michelle Bachelet y Luiz Inácio Lula da Silva. También Bachelet fue artífice del proyecto binacional de Pascua-Lama, un modelo de integración y complementación inédito para lo cual la impulsora, junto con las autoridades argentinas, debieron sortear un cúmulo de exigencias legales y protocolares.

De Evelyn Matthei sólo debe recordarse que en el hipotético caso de llegar a la Presidencia, sería quien tome la posta de Piñera en las acciones para hacer realidad del Túnel Binacional y destrabar los impedimentos que frenaron la explotación del proyecto minero conjunto.