Según la guía presentada por la ministra Garré, entre las circunstancias más habituales en las que se repiten este tipo de violencias que pueden llegar a culminar con la comisión de un homicidio y/o instigación al suicidio se encuentran: los casos de violencia de género en el marco de las relaciones interpersonales (parejas, exparejas, algún otro familiar o conocido), las agresiones sexuales en la vía pública y la explotación sexual‘.