En agosto pasado, con notable éxito, subió a las tablas La barca sin pescador, de Alejandro Casona, con el elenco del Colegio Don Bosco dirigido por el padre Rubén Romero. Y mañana, el teatro "clásico" o "de texto", como le llaman, regresa con otra pieza emblemática: La casa de Bernarda Alba, escrita hace 80 años por Federico García Lorca, de la mano de Expresión Contemporánea que dirige Mónica Munafó (foto). Y volver a escuchar estos títulos llama la atención, porque si bien se han realizado en diferentes oportunidades (muchos recordarán aquellas puestas "mallinistas", además de las encaradas por otros grupos), está claro que no son moneda corriente en una provincia tomada por elencos con nuevas búsquedas, dedicados sobre todo al teatro de experimentación y a explorar dramaturgias propias, que felizmente encontraron un público afín. Sin embargo, tampoco es ajeno el hecho de que hay otro que todavía mira de reojo este teatro "raro", reacción que no está necesariamente ligada a la edad del mismo, y que sí se ha volcado a las salas cuando obras "conocidas" corrieron el telón.

En este contexto, para teatreros consultados por DIARIO DE CUYO, "los clásicos" son una base necesaria, de la que deberían partir actores y directores, incluso cuando después puedan emprender sus propios y diferentes caminos. Para otros, es una constante que se manifiesta cada cierto tiempo, con poco y nada de extraordinario. Una manifestación cíclica que también ven aquellos para quienes esta elección suele partir de una necesidad del grupo de, cada tanto, abrevar en "buenos textos". Y otros, simplemente, los valoran pero no los consideran indispensables en sus propias historias. Sin embargo, todos coinciden en algo: que es bueno que se haga porque es otra opción para sumar público al teatro sanjuanino, objetivo que en definitiva, beneficia a todos.

 

La Bernarda sanjuanina

Con La Casa de Bernarda Alba, Expresión Contemporánea regresa a un clásico con el que debutó como elenco independiente hace 22 años. Dirigido por Mónica Munafó y protagonizado por Ma. Elena Hierrezuelo como Bernarda, junto a Bárbara Barboza (Josefa), Sandra Tello (Angustias), Griselda Olivares (Magdalena), Ma. de los Ángeles Poblete (Amelia), Yanina Marras (Martirio), Paula Márquez (Adela), Alda Castro (Poncia) y Ma. Eliana Acosta (criada); se respetó el texto en una versión más acotada y con otra estética. No es lo único nuevo. En estos dos años de trabajo también fueron despertando otras miradas. "Este drama de mujeres, tan diferentes, que pueden llegar a destrozarse por alguien que viene de afuera, en este caso un hombre, el protagonista tácito, se asemeja mucho a la sociedad sanjuanina. Entonces también es un espejo… Se ve en esto de fijarse más en el otro que en uno mismo, que a veces tenemos; en no querer romper reglas que nos legaron, en lo conservador, en la comodidad de esperar que el otro resuelva mis problemas y hasta en la violencia que hay hoy en la sociedad", comentó Munafó, quien, convencida de que "el arte es transformador", cree que más allá del entretenimiento, Bernarda puede servir para visibilizar situaciones. "Es una manera de denunciar, de hacer ver. Y entonces también un puntapié para sanar", sostiene.

 

El dato. La casa de Bernarda Alba estrenará mañana viernes a las 22 hs en la sala de Expresión Contemporánea (Mendoza 2211 sur, entre Ezpeleta y Quiroz, Rawson). Entrada gral. $80.

 

Ellos opinan

Tania Leyes – Actriz, directora – Ciertas Mujeres, Teatro de Arte

Hacer un clásico presenta a veces un facilismo que va desde que no se necesita la autorización del autor hasta cierta fama que posee y de la cual podemos agarrarnos. Creo que un clásico contiene por un lado la posibilidad de infinitas representaciones o lecturas que para mí excluye justamente el hacerlo "clásicamente". Yo prefiero reescribir sobre el polvo que sobre una pintura de museo se ha acumulado. Porque es ese polvo lo más interesante de analizar. ¿Qué provoca que de algún modo esa obra se siga manteniendo en el tiempo? ¿La tremenda humanidad que lo trasciende o su estructura formal que da cuenta de la relación teatro y contexto político?

Fabricio Montilla- Actor, director
Los clásicos son una tentación para cualquier hacedor teatral, por la potencia poética que estos contienen y la trascendencia temporal. Desde mi punto de vista en la mayoría de los casos los clásicos necesitan ser reescritos o adaptados, no basta con respetar el original para conseguir el impacto que tuvo la puesta original. En términos de convocatoria puede que influya el hecho de que sea un texto conocido, sin embargo pienso que lo que mantiene en el tiempo una obra es su calidad y el modo que dialoga con su contemporaneidad.

 

Jennifer Piñero – Actriz, directora – Auxocromo Teatro
Considero que hay teatro para todos. El teatro como vertiente de expresión artística es fundamental en su diversidad, en su capacidad de expansión. Todo teatro es necesario. San Juan está creciendo exponencialmente en cuanto a hacedores y público (más ahora con la carrera de teatro), y es sumamente enriquecedor que haya tanta posibilidad para empaparse de este arte, que en mi opinión es el más complejo de todos. Bienvenido sea el teatro "de texto". Yo me dedico al teatro experimental, pero considero que las bases parten de ahí, desde una forma de teatro más clásica. ¿Cómo romper las formas si estas se desconocen? Todo teatro tiene el deber de ser movilizante, creo que esa es precisamente la mayor virtud que posee como expresión artística.

 

José Annecchini – Actor, director
Creo que en San Juan siempre hemos hecho teatro tradicional y teatro de experimentación y búsqueda. Ambos son teatro y es bueno que ambos coexistan. Seguramente, la mayoría de las veces, uno tendrá más proporción de público que está relacionado directamente con el hacer teatral y menos público llano, y viceversa, en el Teatro que en esta nota llaman "clásico" al que yo llamo tradicional habrá una mayor proporción de público llano. Creo conveniente acotar que lo diferente a veces se da por tratamientos de textos clásicos con técnicas, procedimientos y búsquedas de experimentación en el legítimo y positivo afán de encontrar una poética, una estética y una ética particular y propia que resulte en un valioso hecho teatral; y a veces se ponen en escena obras de dramaturgia actual, propias de la vanguardia teatral, con tratamientos tradicionales o "clásicos’ de la factura de puesta en escena, sin tener claro qué se busca. Por lo tanto, y hablando de público en general de una y otra características, creo que el teatro bien hecho, a conciencia de la técnica y del arte teatral, tiene buena respuesta del público al que va dirigido, siendo esto último también una decisión del creador. Por último es necesario advertir que la afluencia de público depende mayormente de la mayor, menor o escasa difusión y promoción que los medios de la provincia hacen del teatro independiente.

Mónica Munafó – Actriz, directora – Expresión Contemporánea
El teatro de experimentación me encanta y muchos grupos se han ido formando en este tipo de teatro. Nosotros, con tantos años, ya tenemos nuestra dramaturgia, pero también apelamos a autores como este. Para el teatrero, un buen texto es sentirse respaldado. Buscar uno nuevo es un proceso muy interesante. Hemos transitado los dos y cada uno tiene su enganche. Pero al público sanjuanino, por lo que he visto, le interesa más el teatro de texto conocido. Por ahí no se arriesga a ir a una sala independiente para ver algo que no sabe qué es. Pero no pasa sólo aquí, en Buenos Aires hay muchos elencos que están tomando clásicos. Creo que es parte de un movimiento permanente, como ciclos. De todas formas, en realidad lo que me gusta es saber que hay elencos independientes que estrenan y que podemos ver nuestro teatro.