�-¿Es intención del gobierno macrista mantener la política de derechos humanos, que fue una de las banderas del kirchnerismo?
-La Argentina tiene enormes deudas pendientes, como pobreza, violencia institucional, violencia de género, diversidad sexual, pluralismo cultural, pueblos originarios y acceso a la justicia. Nos vamos a abocar a trabajar en esos objetivos, sin olvidar de verdad, memoria y justicia, que es política de Estado y que es un derecho más entre todos los que marca la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
-Con motivo de los actos por los 40 años del golpe, hubo críticas hacia el Gobierno por parte de organizaciones de derechos humanos. ¿Qué análisis hace al respecto?
-Primero no hay que sorprenderse, porque así es la democracia y hay que saber que se pueden dar distintas posiciones políticas. Lo que sí hay que tener en claro es que hay que sabernos respetar. Hubo agresiones muy fuertes hacia el Presidente, que no tienen ningún viso de verdad porque no se lo puede ligar de ningún modo con la dictadura. Tenemos que ir aprendiendo a respetarnos.
-El Vaticano anunció que abrirá sus archivos y el gobierno de Obama anticipó que desclasificará nuevos documentos vinculados con la dictadura. ¿Qué significarán esos aportes?
-Siempre digo que lo que está oculto genera mucho daño y por eso dar luz a estos temas son cosas muy importantes. Estos archivos y los que estaban en Cancillería son todas cosas que van a ir aportando cada vez más luz para que podamos ir conociendo más desapasionadamente la verdad de la historia de lo que nos aconteció como argentinos.
-¿Van a propiciar la continuidad de los juicios de lesa humanidad?
-Sí, totalmente, vamos a respetarlos. Tenemos que lograr una justicia independiente y fortalecida y que pueda dar alcance a todos los juicios. No hay ninguna duda de que van a continuar porque son política de Estado.
-La Cámara de Casación Penal acaba de liberar a un acusado de haber cometido delitos de lesa humanidad y el temor que existe es que se pueda dar a la fuga. ¿Qué opina sobre el tema?
-Primero, si se fuga, pone en evidencia una falla de nuestras fuerzas federales de seguridad, pero si corresponde hacerlo por aplicación de normas judiciales, puede dar fastidio, pero hay que respetar los procesos judiciales. Eso pone de manifiesto una política equivocada que se llevó a cabo durante muchos años, porque por un lado se hablaba muchos de los juicios, pero por otro lado se los demoraba. Lo que está en duda es cuánto de efectista hubo en tratar de que se prolonguen para tener una bandera, cuando en realidad lo que la sociedad necesita es que los juicios concluyan y haya sentencia. Estamos pagando el precio de dilatar esos procesos innecesariamente.