La ceremonia de apertura del Mundial en Iquique fue sencilla, corta y de buen gusto. Con las tribunas colmadas, la inauguración se hizo esperar por más de media hora de acuerdo al horario que estaba previsto. Igual, la gente quedó feliz esperando la presentación del seleccionado local. Se inició con la entrada de cada seleccionado, en orden alfabético. Las chicas argentinas fueron las segundas y las aplaudieron bastante. Las anfitrionas fueron ovacionadas cuando ingresaron al último de todas. Con todas las delegaciones adentro de la cancha se ejecutó el Himno Nacional de Chile tras lo cual los equipos salieron. A continuación se dieron los bailes autóctonos a cargo del ballet folclórico Wana Wuara en los que se vio un gran colorido, típico de la región norte chilena, bastante emparentada con la música y trajes bolivianos. Luego fue tiempo de los discursos. Sólo hablaron Jorge Soria Quiroga (presidente del Comité Chileno de Deportes) y Armando Quintanilla (en representación del FIRS). Y, de cierre, la pequeña Consuelo Pérez, integrante de la selección nacional chilena de patinaje artístico, realizó dos números, que fueron muy aplaudidos. Al final, volvieron a entrar las banderas, pero todos juntos y siempre con la música de la policía local, todos entonaron el Himno Provincial de Iquique.
