Placebos En San Juan, según la Asociación de Propietarios de Farmacias, una de las formas más comunes de adulterar medicamentos, en los de bajo costo, es mediante placebos o talcos que ponen en lugar de pastillas. Comprar una blisteadora cuesta unos 15.000 pesos y el trabajo se completa con armar cajas con una buena imprenta. Duplicación Se habla de la “duplicación de pacientes” para remedios de alto costo. Dentro de una obra social se hace una receta de una persona como que está enfermo, circula una orden y el paciente nunca se entera y se genera un pago falso de miles de pesos y se cobra dentro de la obra social. A veces gira el medicamento y otras no. Rellenado También para los medicamentos de alto costo, según la Asociación, con la connivencia de personal de centros sanitarios se guardan los sobrantes de un medicamento de dos o tres pacientes que quedan donde se los coloca, y con eso se rellena uno de los frascos originales y entran de vuelta al circuito de venta, más baratos.
