La comunicación y la política
serán los primeros
planos de acción a ejecutar
por parte del
flamante Centro de Estudios Estratégicos
Mineros (CEEM) recientemente
inaugurado por la
IAE Business School, la escuela
de negocios de la Universidad
Austral, en Buenos Aires. Educación,
sociedad, legislación, investigación
y medio ambiente, serán
los otros ejes de acción a futuro,
de un centro cuyo fin es el de funcionar
como un ámbito de reflexión
para consolidar el desarrollo
de la industria minera en el país.
La tarea surge de un análisis
FODA realizado por parte de la
institución y por la que se determinó
que una de las debilidades
más fuertes del sector “es que la
sociedad argentina en general no
tiene cultura minera” (la otra debilidad
detectada es el esquema
tributario regresivo). Así lo definió
Luis Dambra, académico y director
del CEEM, quien dijo que
para propiciar esa cultura será
esencial el abordaje de la comunicación
y la política. “No nos reconocemos
como un país minero
a pesar de las riquezas que tenemos
y en ese sentido la comunicación
es fundamental. Ya comenzamos
a reunirnos con
periodistas de medios nacionales
acordes a este desafío. Buscamos
un periodismo que aporte, no un
periodismo que picanee el conflicto,
sino cómo hacemos desde
la comunicación para que se haga
minería y se haga bien”, detalló
Dambra.
En cuanto al plano político, instalar
el tema minero en la agenda
será otro de los retos para los integrantes
del centro, sobre todo
porque “la minería no esta siendo
reconocida como una política de
estado”, dijo Dambra, aspecto al
que también reconoció como una
debilidad de la industria. “Los ciclos
de la minería son largos, de
30 años o más y eso excede a un
gobierno que maneja un horizonte
de 4 a 8 años. Como política
de estado podemos lograr que estando
cualquier signo político se
le siga dando continuidad; hay
que dar estabilidad política a una
actividad de grandes plazos y
grandes capitales”, agregó.
El CEEM cuenta con el apoyo de
las principales mineras que operan
en el país como Barrick, Yamana
Gold, Patagonia Gold S.A. y
Minera Santa Cruz (Goldcorp).
Ahora la pregunta es: ¿Por qué
un centro de estudios para la minería
en Buenos Aires?. Según
Dambra, tiene que ver con la visión
nacional y regional del IAE
como escuela de negocios, más su
interpretación de la minería
como una actividad que al 2030,
podrá generar una participación
en el PBI equivalente a la del sector
agropecuario.
Datos recientes fundamentan este
concepto y hay indicadores concretos
como el caso de la mina
iglesiana Veladero, por ejemplo.
Según el informe “Desarrollo socieconómico
de la provincia de
San Juan. El impacto de la mina
Veladero”, elaborado el año pasado
por la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), a partir de
2005, año en que se pone en marcha
este proyecto, la provincia
empezó a crecer a una mayor velocidad
que la economía argentina.
Como consecuencia de esta
fuerte expansión, la participación
de San Juan en el PBI nacional
pasó de 0,96% en 2004 a 1,29% en
2011. “El rápido crecimiento del
producto ha permitido un significativo
aumento en el PBI per cápita,
el cual se incrementó en un
267% entre 2004 y 2010, superando
al aumento experimentado por el
promedio nacional y por las provincias
de la zona agrícola-ganadera”,
puntualiza el informe de
la UTN.
Para una provincia minera como
San Juan un centro de estas características
puede tener otras repercusiones:
Más allá del impacto
económico, es la posibilidad de
hacer conocer en la gran urbe lo
que significa vivir de la minería.
Para Dambra, “en Buenos Aires a
San Juan se lo observa como un
fenómeno importante pero con
cautela, es porque la minería sigue
estando ausente en la agenda.
Pero si nos apalancamos en la necesidad
de inversiones que necesita
el país y que la minería puede
ser el sector que puede traer esas
inversiones, las perspectivas pueden
cambiar. Esto nos puede ayudar
a instalar el tema en la
agenda del ciudadano de Buenos
Aires y cuando el tema se instala,
el político comienza a resolver”,
concluyó.
En este marco, el desafío de este
centro de estudios será el de instalar
a la minería como una actividad
importante para el país,
mediante el aprovechamiento de
la tecnología de punta y las buenas
prácticas de trabajo en respeto
con el medio ambiente.
