San Martín perdió y toda derrota duele. Más cuando es la primera fuera de casa, más cuando se jugó bien, más cuando tuvo dos clarísimas opciones con Roberval y Scatolaro, más cuando pese a que el rival lo estudió bien y le cerró todos los caminos, el equipo nunca se cayó ni desesperó y siguió con su juego por abajo, salió siempre jugando y tuvo las chances más netas. Quedó claro que Instituto le quitó la pelota, pero nunca creó una jugada de peligro en el área, mientras que el Verdinegro lo contrarrestó con inteligencia y esperando su momento para tener mayor claridad que el rival. Por eso la derrota por 1-0 del único puntero en la 10ma. fecha de la B Nacional dejó caras largas. Porque parecía un empate, y sobre el final Grabinski lo tomó en el área a Abila y el mismo "Wanchope" lo cambió por el gol del triunfo picándola en el tiro del penal, para poner a la Gloria como escolta del sanjuanino, a tres puntos.
Mérito del triunfo estuvo en el DT Claudio Vivas, que estudió al rival y desde el inicio supo como oponerle resistencia. Las dos líneas de cuatro le cerraron los laterales y le complicaron la salida superándolo en la cancha y dominando, pero en lo futbolístico nunca fue más.
Al minuto Torresi sacó provecho de su pegada y Pocrnjic la mandó el tiro de esquina. Y a continuación llegó lo más claro para el Verdinegro tras la triangulación del tridente ofensivo. La aguantó Penco, Barreiro metió el centro y Roberval en la puerta del arco la tiró por arriba. Era el arranque y se notaban las diferencias, porque mientras San Martín era más práctico y punzante, la Gloria tenía la pelota y elaboraba cada jugada.
Sobre los 16′ cayó el envío de Barreiro, Grabisnki le metió en el área y Sosa de cabeza la mandó por arriba. Instituto contestó, con su único argumento, el remate de media y larga distancia que seguía agigantando a Pocrnjic.
La pelota ya era dominio local y fue donde el trabajo de Sosa en el fondo y Alderete en el medio se hizo clave. Aunque cuando podía hacerse de la pelota, tocaba y llegaba. Instituto era fuerte por la derecha y allí fue donde a Videla lo encararon siempre. El volante vio la amarilla y, al quedar condicionado, Darío Franco lo cambió por Más, para tener mayor marca.
En el arranque del complemento, Penco pudo marcar pero su frentazo se fue muy cerca. Y a los 10′ a Barreiro y a Barsottini se les fueron las manos y Baliño hizo la fácil y expulsó a ambos. Vivas metió a Rébola para rearmar la línea de cuatro y Franco contestó con Poggi para mantener el tridente arriba.
Pocrnjic se jugó la pilcha y se tiró de cabeza tras una serie de rebotes en el área. El tránsito era por el medio y la tranquilidad de San Martín hacía creer que nunca le iban a convertir. Incluso Roberval probó de lejos y sobre los 32′ llegó otra clarísima cuando Scatolaro le pegó de frente al arco en el área chica e increíblemente Carranza, sosteniéndose en el aire, la sacó al córner.
Parecía empate, aunque ninguno renunciaba al triunfo, hasta que a los 39′ Grabinski lo tomó a Abila y el claro penal se transformó en el aliado de Instituto para anotar el 1-0. Lo que quedó fue el mismo libreto del Verdinegro: pelota al piso, tocando, sin rifarla y que encontró el frentazo de Sosa y el remate de Alderete que no tuvieron final feliz, para una derrota que duele, pero que con la cabeza más fría se analizará que se perdió jugando a lo San Martín, sin salirse del libreto y con la frente alta.