Una finca de Ullum, donde se produce aceite de oliva de primera calidad, acaba de dar un paso inédito en el país, ya que con los desechos del olivo se encaró un proyecto en donde se genera energía con esa basura.
Una finca de Ullum, donde se produce aceite de oliva de primera calidad, acaba de dar un paso inédito en el país, ya que con los desechos del olivo se encaró un proyecto en donde se genera energía con esa basura.