La atracción que siempre sintió el hombre por la Luna vuelve a renacer con la nueva generación de vehículos que está desarrollando la NASA, que no sólo iniciarán una nueva era de misiones espaciales, sino que posibilitará en el futuro habitar en la Luna.

Si bien, parece un sueño imposible de cumplir, "vivir en la luna" es uno de los objetivos del programa "Constellation" con el que la NASA aspira a volver a poner un hombre en el satélite natural de la tierra e iniciar los tan esperados viajes tripulados a Marte.

Y el sueño se hace cada vez más real ya que ayer el público pudo ver el prototipo de "Orion", el módulo en el que viajarán los próximos astronautas a la Luna.

"Orion" estuvo expuesto al aire libre, en el paseo del National Mall de Washington, frente al museo del Aire y del Espacio, donde científicos, ingenieros y miembros de la NASA explicaron al público cómo serán las próximas expediciones lunares que se realizarán con el objetivo de abrir una base permanente.

"En 2020 seremos capaces de aterrizar en la Luna y de realizar misiones permanentes de seis meses", aseguró Alan Rhodes, director adjunto del programa de pruebas y verificación del programa "Constellation"."Estamos planeando construir bases en la Luna así que, cuanto más aprendamos, y mejor sepamos cómo funciona este vehículo, más próximos estaremos de saber cómo construir esos asentamientos lunares", agregó.

Construida sobre la base de los transbordadores Apolo, pero con una gran innovación tecnológica, "Orion" tendrá capacidad para transportar una tripulación de hasta seis miembros hasta la Estación Espacial Internacional y cuatro hasta la Luna, frente a los tres que tradicionalmente podían subir en los Apolo.

Además, a diferencia de los transbordadores que llegan al espacio adosados lateralmente al cohete impulsor, la nave "Orion" viajará como las cápsulas "Apolo", montada en la cima de un cohete, en los que la NASA también está trabajando el Ares I y el Ares V, así como en el módulo de alunizaje Altair.

Según explicó Richard Banko, ingeniero del Naval Surface Warfare Center (NSWC), que estudia las condiciones que deben darse para que la cápsula resista el impacto en el agua cuando vuelva a la Tierra, están comprobando la resistencia de la escotilla y de los flotadores que evitan que se hunda.

De momento, la prueba se ha hecho en una piscina, pero el prototipo se va a llevar ahora a Florida donde el equipo comprobará su resistencia al oleaje y al mar.

Sin embargo, lo que comenzará como una misión espacial es la base para un proyecto mucho más amplio ya que la NASA espera que "no sólo sea una misión científica, sino una misión que abra la posibilidad de vivir en la luna para todo el mundo".

La intención de la NASA, una vez que se retomen las misiones a la luna, es "empezar a estudiar todas las necesidades para tener una presencia permanente que nos permita llevar más y más gente y explorar todos los maravillosos tesoros que puede haber en su superficie y todo el conocimiento que nos espera allí", explicó Alan Rhodes. Pero a la vez, esperan "ser capaces de enviar personas a Marte en un vehículo similar en 2030", añadió.

Según se supo, la primera misión de "Orion", está prevista para antes de 2020, de acuerdo a los planes de la NASA. Pero en la mente de los científicos está previsto que en 2015 se haga el primer lanzamiento de prueba con astronautas y en 2020 se cumpla el sueño de volver a la Luna.