Tienen 28 años haciendo música. Un blues que hicieron propio y aggiornaron con oído porteño. La Mississippi actuará por primera vez en San Juan esta noche (ver aparte) y así habrán completado el recorrido por todo el país, según destacó el propio líder de la banda, Ricardo Tapia, en conversación con DIARIO DE CUYO. Surgidos como una banda de ocho, hace dos años eliminaron los instrumentos de viento y se transformaron en un quinteto ‘con un sonido muy eléctrico’, dice Tapia sobre el actual trabajo del grupo que también integran Claudio Cannavo, Gastón Picazo, Gustavo Ginoi y Juan Carlos Tordó. El músico también habló sobre Inoxidables, el disco con temas de grandes del rock nacional que editaron el año pasado, que mostrarán aquí, además de un repaso por su extenso repertorio y mientras preparan un nuevo trabajo discográfico.
Es la primera vez que vienen a San Juan, ¿por qué no vinieron antes? Es la única provincia de la Argentina a la que nunca fuimos. Con San Juan completamos el mapa, ahora vamos a poder decir que estuvimos en todo el país. Para nosotros es muy importante. Cuando uno no va a una provincia es que no hay un productor que te pueda llevar. Porque si es por ir, uno va. Es un tema de producción externo a la banda. Estamos contentos de poder ir.
¿Y son las expectativas de estar ante un publico nuevo?
Son muy buenas. San Juan tiene un público que le gusta la música negra. La Missisippi es una banda bastante amplia, no sólo un nicho de blues. Tenemos amigos en San Juan… yo manejo las redes sociales y tengo mucha gente de San Juan.
¿El disco Inoxidables les dio un condimento extra? El disco tiene mucho sonido nuestro. Si nosotros hubiésemos sido siempre una banda muy purista de blues sería mucho más insano, pero como siempre el estilo fue más rock argentino y formamos parte de ese círculo, hace que cuando tocamos clásicos del rock, suenen como tocamos nosotros. Además son temas emblemáticos para nosotros, algunos de los 70 de cuando éramos jóvenes. Y otros de los 80, cuando ya éramos señores con hijos preparados para luchar… (risas) así que tiene canciones muy lindas que fueron parte de nuestra vida. Por eso le pusimos Inoxidables, porque cuando uno las empieza a escuchar, te das cuenta por qué trascendieron en el tiempo. ¿Y qué es lo que las hace así? El talento. El talento de la composición de grandes artistas que supieron en momentos críticos de la Argentina componer cosas geniales. Porque el 90 por ciento de lo que se grabó en este disco nuestro fue compuesto bajo periodos militares. Eso habla muy bien del rock argentino. Porque las mejores composiciones fueron hechas en momentos muy duros. Estaba muy claro quién era el enemigo de toda la gente, cuando uno tiene esas cosas claras, compone mucho mejor.
-Hay una sensación general de que ya no se compone música como aquella… -Bueno, la variante de composición cambió; porque en ese momento se trabajaba respecto a la armonía y melodía. Ahora eso no es lo que prima en las canciones, sino la rítmica y el poder… son diferentes estilos. El mundo fue cambiando, se puso más duro, aquel era un periodo más romántico donde se creía más en algunas cosas, que después se descreyó. Es así.
-¿Cómo surgió la idea de un disco completo con esos clásicos? -Surgió charlando por las redes con el público y con la gente de La Trastienda, de Pop Art, que nosotros hacemos muchos conciertos ahí. La gente nos empezó a decir que hiciéramos un disco con esos temas que solíamos incluir en la lista de temas (de los recitales). Estamos en medio de un momento de composición de un nuevo disco, entonces vino muy bien ser intérpretes de discos de otros. Es una forma de salir de uno y relajar… yo llevo 26 años componiendo sin parar, así que me tomé un descanso y me gustó mucho. La mayoría es gente amiga, que quiero, algunos que no están. Spinetta, o Pappo, u Otero. Me parece que ser intérprete de obras de amigos estuvo bueno.
-¿Cuál es tu preferido?
-Tengo varios, pero me gusta Post Crucifixión de Pescado rabioso y Pato trabaja en una carnicería de Moris, que tuve el gusto de invitarlo a tocar ante 5.000 personas, fue muy emocionante. Él dijo ‘bueno, tenemos 50 años de rock, así que vencimos’. Es gente que fue muy influyente en la cultura popular, porque el rock argentino tiene un lugar muy grande, en algunos casos más grande que el folclore en la cultura popular.
-¿Cuál es tu opinión del rock hoy? -Si vas a un recital de Paul McCartney, hay 55 mil personas, de esas, 32 mil son músicos. Así veo al rock argentino… Hay más músicos que público. Todo tiene un decante, siempre queda la gente que tiene proyectos más claros. Cuando un músico viene y me pregunta qué le recomiendo, le digo hacé una carrera universitaria, tené una carrera, una profesión. No es fácil pedirle a la música que te dé todo lo que querés; no en este momento, hay una sobrepoblación, además de las hiperinformación que hay, cuando hay tanto distinto .. es como entrar a un restaurant que tiene una carta de 850 platos. Es más difícil elegir.
-¿Qué hace falta para trascender entonces?
-Ser particular, muy personales. No tenerle miedo a hacer cosas particulares y muy propias, es lo mejor que te puede pasar. Tener una personalidad definida y hacerlo bien.
-¿Te imaginabas, cuando empezaste, permanecer tantos años? -No, no creo que nadie de nosotros imaginaba que esto tuviera tanta trascendencia. En 2018 cumplimos 30 años, 30 años en la música es mucho, sin haber parado nunca. Habiendo vivido de, para y con la música yo creo que me puedo quedar feliz.
