Estudiantes goleó ayer por 4 a 0 a Deportivo Quito, de Ecuador, en partido correspondiente a la cuarta fecha del grupo 5 de la Copa Libertadores en el que Alejandro Sabella debutó como entrenador "pincharrata".
El "pincha" volverá a jugar el 8 de abril próximo, en La Plata, contra el puntero Cruzeiro, que le ganó en Belo Horizonte por 3 a 0.
No pudo ser mejor la presentación de Sabella, tan querido por la hinchada estudiantil como su colega de Deportivo Quito, Rubén Darío Insúa.
Es que en los primeros 25 minutos los platenses desarrollaron el mejor fútbol en lo que va del año, de la mano de un Pérez inspirado y un Boselli muy efectivo.
El ex Boca precisó un centro de Verón, a los 4, le puso la pelota en la cabeza para que abriera el marcador.
El ex Boca disfrutó de otro mano a mano en los 20 minutos posteriores, hasta que a los 24 recibió una precisa habilitación de Benítez y señaló el segundo con un derechazo cruzado.
Allí se terminó virtualmente el partido, aunque todavía quedaba mucho por delante.
Y hubiese sido saludable para Estudiantes que así fuera, porque hubiera evitado la seria lesión que a los 35 minutos sufrió Alayes, que debió ser reemplazado a raíz de un severo esguince de rodilla izquierda.
Después, ya sobre la hora, un largo saque de arco de Andujar llegó a los pies de Pérez, que recorrió unos 20 metros con el balón y definió sobre el cuerpo de García.
La segunda etapa solamente fue para el floreo de los jugadores locales y el regocijo de su hinchada, además del tercer gol anotado con otro cabezazo por Boselli, que tomó contacto con la red por primera vez en el año.
Así los jugadores de Estudiantes recibieron a Sabella y marcaron un punto de inflexión respecto de su antecesor, Astrada, al menos en lo que pudo observarse dentro del campo de juego.