Un silencio de reflexión cruza todo el curso, miradas cómplices entre compañeros, nadie parece saber la respuesta. Apoyado en la pizarra y esperando algún comentario, el instructor sentencia con voz de mando: “Quiere decir que si se equivocan, los voy a pillar al tiro”. La tensión parece alivianarse con las risas. Son las risas de los participantes del sexto curso de capacitación en operación y mantenimiento de máquinas y camiones fuera de ruta de la empresa Barrick para su mina Veladero. La mayoría de los participantes del curso coincidió en que el motivo para ingresar a la capacitación es la difícil situación económica actual. “Casi todos estamos acá porque tratamos de conseguir un trabajo que nos brinde seguridad laboral por un lado y estabilidad económica por otro. Las cosas están cada vez más caras y con los trabajos normales de un taller o haciendo pequeñas cosas ya no alcanza para mantener a la familia”, comentó Rodolfo Fernández, de 39 años, uno de los seleccionados para realizar el curso de capacitación.
La dificultad del curso radica en el tiempo de cursado y en las distintas evaluaciones que deben realizar los aspirantes durante las 1.400 horas de duración total de la capacitación. “Es muy difícil cuando uno tiene que dejar el trabajo y la familia para poder venir a cursar, sabiendo que es difícil quedar seleccionado. Pero la estabilidad que brinda el trabajo justifica el esfuerzo”, expresó Roberto Quilpatay, participante del curso.
Los profesionales a cargo de la capacitación provienen específicamente del Centro de Desarrollo y Capacitación Técnica de la empresa Barrick en Antofagasta, Chile. Donde se encuentran “los mejores profesionales que posee la empresa en la materia”, comentó Miguel Martín, jefe de Prensa de Barrick en San Juan. “Esto no es fácil, hay que estudiar y tener mucho tiempo disponible para realizar trabajos prácticos. Pero todo se puede con disciplina, ganas de aprender y trabajar de manera responsable”, expresó Alexander Varas, Técnico e Instructor del curso de capacitación.
Muy pocos serán los que al finalizar la capacitación queden seleccionados como empleados de la empresa Barrick. De un total de 350 aspirantes iniciales, sólo quedarán trabajando aproximadamente 16 personas para la empresa. “Es muy difícil estudiar y asistir cuando hay un trabajo que realizar y una familia que mantener. Pero aquellos que no queden seleccionados en la instancia final, contarán con un curso de capacitación para toda la vida. Y podrán trabajar en cualquier otra mina del país o de la provincia”, comentó Miguel Martín.
La primera parte del curso se divide en dos secciones teóricas. La primera corresponde a los conocimientos técnicos, mecánicos y físicos básicos. La segunda implica adquirir el conocimiento del desarrollo de las normas y procedimientos operacionales de máquinas y camiones. La parte práctica incluye 1.200 horas entre actividades en el simulador de manejo (ubicado en la mina Veladero) y la práctica específica de conducción de los camiones reales. Cada etapa tiene su propia evaluación excluyente. Los exámenes teóricos se aprueban con el 80 por ciento de efectividad, siempre y cuando se haya obtenido el 75 por ciento de asistencia y totalidad de trabajos prácticos.
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