El técnico de Tigre, Rodolfo Arruabarrena, sobre quien pesaban rumores de despido en caso de una derrota, suspendió la conferencia de prensa y ordenó un trabajo de 40 minutos para mejorar el rendimiento físico de sus jugadores. Los titulares realizaron una tarea diferenciada y el resto del plantel, un trabajo intenso.

No participaron de la práctica Martín Galmarini, quien se marchó del estadio después del partido y el delantero Carlos Luna por una descompostura.