San Juan, 22 de julio.- “El domingo hizo -42 grados de sensación térmica y si a eso le sumas el viento, no podes ni salir. Nos quedamos encerraditos nomas”, explicó entre risas Pablo Daniel Caballero Karanik el sanjuanino, chimbero, que fue designado hace pocos días capellán en la Base Aérea Marambio en la Antártida.
En diálogo con Radio Light Pablo explicó que es “capellán de la Escuela Naval Militar. Tengo apenas 10 años de ser ordenado. He realizado otro trabajo apostólico en la Ciudad de La Plata, he sido párroco en la Medalla Milagrosa y hace unos años atrás me ofrecí para venir a la Antártida”.
Pablo aclaró que “como soy Capellán Naval obviamente tendría que estar en una Base Naval, como la que hay acá en la Antártida, que es Orcadas, y como nuestro buque rompehielos está en reparaciones, no había esa posibilidad de estar en el buque”.
“Para mí fue providencial venir a la Base Marambio porque una cosa es estar en el buque y otra es estar en la base, estar en terreno como decimos, y acompañar a nuestros argentinos y que están hace tiempo en la Base Marambio” dijo el sanjuanino.
Además explicó que “a mi ordenaron en el 2004 y en junio del 2005 me llama el Obispo Castrense para que fuera Capellán, me ofrece él y yo estaba viviendo en La Plata como vicario en Cristo Rey y me quedaba muy lejos viajar al Colegio Militar de la Nación, porque iba a quedar como capellán de ahí del Colegio Militar, entonces monseñor me pregunta ‘¿Qué tenés más cerca? Y yo le dije que tenía la escuela Naval, así que me mando a la escuela”.
Sobre cuál es el trabajo que tiene asignado en la Antártida Pablo manifestó que “lo que hacemos es de asistencia espiritual, tanto del personal militar como así también del personal civil que trabaja acá. Mi trabajo también se extiende a las visitas, a las otras bases que tenemos aquí, como Esperanza, Belgrano, Orcadas pero eso también depende mucho de las condiciones climáticas. Por ejemplo ayer iba a salir el avión pero no pudo salir”.
“El domingo hizo -42 grados de sensación térmica y si a eso le sumas el viento, no podes ni salir. Nos quedamos enceraditos nomas”, dijo entre risas el sanjuanino que pasó su infancia en Chimbas.
Como es la vida en la Antártida
“No es una vida fácil. No son meses fáciles acá. Una por la cantidad de luz solar que tenemos que es muy poca y otra porque a veces tenemos presión baja y eso te influye en el físico porque como que a veces te deja planchado”.
Según lo que explicó Pablo la vida en el continente blanco es un poco rutinaria pero que el buen humor es clave para vivir en un lugar tan inhóspito. “Nosotros acá tenemos la formación como toda base y todos los días se leen los partes de la novedad del día. Por ejemplo hoy la temperatura va a ser de -13 grados y sensación térmica de -25. Después cada persona se va a sus puestos de trabajo. El sol sale acá a partir de las 9:30-10 y está hasta las 4 de la tarde. Pero hay bases, como por ejemplo Belgrano 2, que hay días del año en el que no hay luz solar”.
“Después de la formación yo hago una breve reflexión espiritual, doy la bendición, se reza por una intención particular, un familiar enfermo y a las 20 tenemos la misa todos los días acá. Tengo una capilla muy bonita cuya patrona es nuestra señora de Loreto, que es la patrona de la Fuerza Aérea y después me saco el hábito, me pongo el equipo térmico y me pongo a recorrer las distintas estaciones para acompañar a los muchachos. Acá el buen humor es fundamenta sino esto no se puede llevar a cabo”, explicó Pablo.
Al finalizar, el Capellán de la Base Marambio no dejó pasar la oportunidad para mandar un saludo “le mando un enorme saludo a la gente de Chimbas, del Barrio Los Pinos, también a mi Albardón porque muchos familiares los tengo ahí y a todos en San Juan”, concluyó el capellán sanjuanino Pablo Daniel Caballero Karanik .