El equipo de Córdoba a peteco de la velocidad de Leandro Botasso, que sumó dos medallas doradas (Velocidad y Keirin), a las que se sumaron las tres conseguidas por sus corredores juveniles, le permitieron a los mediterráneos volver a controlar el medallero, como no lo hacían desde San Juan 2005, cuando con Brunetta y Jorge Ruschansky derrotaron a Juan Curuchet y Juan Gaspari, que corrían para la Mar y Sierras.
