Ayer por la tarde, el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, firmó con los gobernadores de San Juan, Mendoza y Río Negro, José Luis Gioja, Francisco Pérez y Alberto Weretilneck, la homologación de los convenios de corresponsabilidad gremial que permitirán a los empleadores el registro laboral de unos 75.000 trabajadores de cosecha, que se aplicará retroactivamente al 1° de marzo pasado y que en la provincia alcanza a unos 20.000 trabajadores vitivinícolas.

Se trata de la puesta en marcha de una forma de registración muy anhelada por el sector que debido a sus características temporarias, generalmente funcionó en negro, sin ningún aporte. Había sido firmado el 29 de diciembre pasado, luego de un acuerdo inédito entre empresarios y gremios, pero había dudas de que se pusiera en marcha para esta cosecha.

Ayer lo firmó la máxima autoridad de Trabajo y rige desde el primer día de este mes.
Tomada agradeció a los gobernadores y a las organizaciones sindicales por ‘la férrea tarea‘ que cumplen y destacó la actitud de los empresarios dispuestos a asumir responsabilidades para que ‘la realidad se modifique‘, acompañados por ‘un Estado presente para construir un país para todos‘, subrayó el ministro, en el auditorio Malvinas Argentinas, de esa cartera en Buenos Aires. ‘Los productores vitivinícolas de Mendoza, San Juan y Río Negro asumirán el compromiso de incluir en el empleo registrado a alrededor de 75.000 trabajadores, efectivizando el goce del derecho a la seguridad social de un sector postergado‘, afirmó. Por su lado, el ministro de Producción de San Juan, Marcelo Alós; destacó que San Juan sea ‘la precursora de la puesta en marcha de este tipo de convenios‘.

La AFIP será la responsable de instruir a los incluidos en estos convenios la forma de implementación de los mismos, ‘la idea es poner en marcha un sistema ágil, operativo y dinámico, cuya operatoria se centra en un formulario en el que se dará el alta temprana de cada trabajador‘, informó a este diario Adrián Cuevas, ministro de Gobierno de la provincia.

EL RÉGIMEN

La ventaja de este régimen para los empleadores radica en que difieren el pago por cada cosechador contratado hasta después de vendido el producto -vino, uvas o mostos- y pueden pagar los aportes del trabajador desde agosto y hasta en cinco cuotas. También se beneficia en un 50% de descuento respecto a las cargas que debería afrontar con un empleado rural. Por su parte, los trabajadores adhieren automáticamente al sistema nacional de seguridad social -obra social, jubilación, pensión, asignaciones familiares, ART y seguro por desempleo- y no pierden sus asignaciones universales, sino que se les suspenden momentáneamente, el tiempo que dure su alta laboral.

El ministro Tomada destacó el trabajo local para llevar a cabo la homologación de ayer y felicitó a Gioja, ‘siempre estuvo atento para impulsar y forjar estos convenios, para que se pudieran firmar, para que pudieran haber más incluidos, más trabajadores con certeza‘, dijo, luego de que el Gobernador lo comprometiera públicamente a avanzar con el sector frutihortícola de San Juan, para la obtención de beneficios similares.