El Gobierno salió ayer a meter mayor presión sobre el vicepredidente, Julio Cobos y el presidente del Banco Central, Martín Redrado, dos de las figuras que, por estas horas, son una especie de enemigos públicos número uno de la gestión de Cristina Fernández por el conflicto sobre el uso de las reservas para pagar la deuda.
Por un lado, el jefe Gabinete, Aníbal Fernández afirmó que el vicepresidente Cobos "no sirve ni para una sociedad de fomento" y lo que está haciendo Redrado "es una payasada". Por otro, el jefe de bloque oficialista en Diputados, Agustín Rossi, dijo que "Cobos se tiene que ir". Lo mismo dijo de Redrado ya que ‘no tiene apoyo ni del oficialismo ni de la oposición".
En una entrevista con el diario Perfil y al ser consultado sobre si votaría a Cobos, el jefe de gabinete respondió que "no sirve ni para la sociedad de fomento" y consideró que "la historia lo va a maltratar".
También, Aníbal Fernández se refirió al ex presidente Eduardo Duhalde, de quien señaló es "la historia malversada, tuvo un lugar importante en la historia que tiró a la alcantarilla sólo por aparecer en un par de diarios. Es una locura lo que ha hecho".
"Le tengo respeto y hasta cariño, pero si hace mal las cosas, hace mal las cosas. Duhalde no existe más en la política, no va a participar de la elección. Sabe Dios qué cosa está discutiendo", añadió Fernández.
Sobre Redrado, el jefe de gabinete sostuvo que siempre tuvo "una muy buena relación con él, pero está haciendo una payasada, un profesional de su nivel no puede cometer esos errores".
"Le metió púa Cobos y algunos que lo usaron, lo convencieron de que lo que estaba haciendo era positivo y es una macana grande como un rancho. Él fue convocado por la política y tiene que responder a la política", consideró Fernández.
Recordó que Redrado "nunca estuvo de acuerdo con acumular reserva, pero hay una sola persona que decide sobre la política fiscal, cambiaria y monetaria y es la presidenta de la Nación". Finalmente, el jefe de Gabinete aseguró que "este barco no se hunde, cada vez flota más y anda más rápido".
En tanto, Agustín Rossi, reiteró que el vicepresidente Julio Cobos "se tiene que ir" y consideró que "ya quedó claro" que Martín Redrado "no tiene apoyo político" ni del oficialismo, ni de la oposición.
"Cobos se tiene que ir. Cuando tomó la decisión de construir un liderazgo opositor sabía que caminaba por un desfiladero estrecho y para mantener el cargo tendría que actuar con prudencia, y me parece que lo perdió", sostuvo Rossi.
Aclaró que "incluso (Mauricio) Macri le dijo que si continúa hasta el fin de su mandato no puede ser candidato a presidente".
"Cobos hace tiempo que no es el representante del Ejecutivo ante el Congreso, es un dirigente de la oposición y ahora se ha convertido en el principal obstaculizador de las iniciativas parlamentarias del oficialismo". En torno al removido titular del Banco Central, Rossi dijo que "en la última reunión de la Bicameral quedó en claro la falta de apoyo político de Redrado: no cuenta con el respaldo de la Presidenta, ni del ministro de Economía, está en minoría en el directorio del Banco y obviamente el oficialismo partidario está en contra". "Pero además la oposición dejó en claro que la situación de Redrado es insostenible. La salida de Redrado del Banco ayudaría a reencauzar la situación", señaló.
