Efectivos del Servicio Penitenciario concluyeron ayer una requisa en los pabellones 1 y 5, que terminó con el secuestro de 35 puntas. Y en la policía esperan el análisis de sangre en dos de ellas, porque creen que una fue usada por el sospechoso Enzo Alvarez (25 años, preso por primera vez por tres asaltos) para ultimar Noé Moreno (37, varios años de encierro). Fue durante una pelea apenas terminó el partido de fútbol entre los equipos de los pabellones 1 y 5 el lunes minutos después de las 14. La autopsia reveló que Moreno recibió cuatro puntazos: uno en la cintura (costado izquierdo), dos en la cabeza (uno que perforó su cráneo) y la letal, de frente en la zona del hombro izquierdo, que dañó una arteria pulmonar, dijeron fuentes judiciales.