Ayer comenzó el escrutinio definitivo de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del último domingo y pasará mucho más que de costumbre para que se conozcan los resultados finales. El recuento en contiendas anteriores se hizo en no más de 5 días, pero en la Justicia Electoral Federal calculan que ahora necesitarán un par de semanas. Esto, después de hacer una prueba interna del tiempo que les llevará contabilizar tantas categorías y precandidatos y completar las planillas oficiales. El plazo podría estirarse si se tienen que abrir urnas en departamentos donde el resultado parcial es muy ajustado, como Caucete y Calingasta.
“Va a ser más largo que de costumbre”, aseguró ayer el juez federal con competencia electoral, Miguel Gálvez. El magistrado no quiso dar un plazo concreto, pero en su entorno dijeron que necesitarán unos 15 días para finalizar el escrutinio y tener los resultados finales en las 9 categorías que se pusieron en juego en la primera elección de este año.
El cálculo sale de un simulacro de escrutinio que hicieron los funcionarios electorales y el personal judicial afectado a esa tarea. Midieron el tiempo que les lleva contar los votos en base a lo que dicen las actas y el llenado de las planillas que darán cuenta del resultado definitivo. Si el plazo no se puede bajar, recién en la semana del 24 se sabrá oficialmente quiénes fueron los más votados en las PASO.
El trabajo se demorará más que de costumbre, principalmente, por el número de ofertas electorales y categorías de precandidatos. A diferencia del 2011, cuando debutó el sistema de Primarias, esta vez hubo internas en casi todos los frentes y eso hizo que la cantidad de aspirantes, boletas y posibles combinaciones en el cuarto oscuro se fueran a las nubes. Es un fenómeno que no sucedía desde 1999, cuando se aplicó por última vez la ley de Lemas, los postulantes que se inscribieron fueron más de 1.900.
El escrutinio definitivo comenzó con Albardón y Santa Lucía. En el primero no se registraron mayores cambios a lo que arrojó el conteo provisorio y el segundo se continuará contabilizando hoy, para seguir después con 9 de Julio, Capital y si da tiempo, Angaco y Jáchal.
Esta semana la tarea seguiría hasta el sábado en la mañana y se retomaría el martes (el lunes es feriado). Eso era lo que analizaba ayer Gálvez, en virtud del agotamiento que tiene el personal después de la extensa y tediosa jornada del domingo, que en realidad se extendió hasta la madrugada del lunes por el profundo retraso de las autoridades de mesa a la hora contar los sufragios en las escuelas y mandar los telegramas a la Justicia Electoral.
En el cálculo, los funcionarios no incluyeron el tiempo extra que podría demandar contar voto a voto en algunos de los distritos donde hay polémica entre distintas fuerzas políticas. Las ventajas más estrechas se dieron en Caucete, Calingasta y Zonda, pero también existen quejas del basualdismo por el cómputo provisorio que hizo la Justicia Electoral nacional en la categoría de diputado departamental en Rivadavia y Santa Lucía (Ver recuadro).
En el departamento del Este, entre los precandidatos oficialistas Mariela Ginestar y Emilio Mendoza hay sólo 170 votos de diferencia y quedan por escrutar unos 1.200 que no se pudieron sumar en el provisorio por errores en los telegramas. En Calingasta, el giojista Robert Garcés se impone por 25 sufragios en la interna por la banca departamental, pero Alfredo Amín mostró los telegramas de su espacio y del basualdismo que lo dan por ganador por más de 500.
