En su último acto como presidenta, Cristina Fernández de Kirchner bromeó ayer sobre el final de su mandato al asegurar que ‘a las 12 me convierto en calabaza‘, como en el cuento de Cenicienta.
De esa manera, cuestionó la medida judicial que determinó que su mandato caduca en la medianoche del miércoles y habilita a que haya un mandatario provisional, por doce horas, hasta que Mauricio Macri hoy jueves preste juramento en el Congreso como nuevo jefe de Estado. ‘No lo merecía ningún argentino‘, dijo CFK en un acto a las puertas de la sede del Poder Ejecutivo, frente a miles de militantes kirchneristas que colmaban la Plaza de Mayo.
‘Quiero decir algo. Con este estado de las cosas todos los argentinos estamos un poco en libertad condicional‘. ‘He visto muchas medidas cautelares, pero en mi vida pense que iba a haber un presidente cautelar durante 12 horas en mi país. Lo digo con sinceridad porque luego de que el pueblo argentino en las últimas elecciones presidenciales concurrió tres veces a las urnas me dolió mucho ver un presidente en una sentencia judicial‘, remarcó.
La mandataria aseguró por la tarde que le hubiera ‘gustado‘ entregar ‘los atributos de mando en el Congreso‘, a Macri, a quien acusó junto con la Justicia de ‘violentar la Constitución y poner presidente por decreto‘. A su vez, ironizó sobre que no puede hablar mucho porque a las doce se convierte ‘en calabaza‘.
Cristina ironizó sobre la presencia de cierto ‘aleteo de los buitres‘ y reafirmó su convencimiento de que el ‘desendeudamiento y la necesidad de tener autonomía no es una cuestión ideológica sino estrictamente operativa‘, a favor ‘del país‘.
Mientras los militantes kirchneristas coreaban ‘golpe de Estado‘ y otras consignas en contra de Macri, Cristina dijo que ‘si con tantas cosas en contra hemos hecho tantas cosas por los argentinos, cuántas podrán hacer los que tienen estos factores a favor‘. ‘Dios ilumine a toda la dirigencia argentina que va a gobernar el país para que piensen en este mundo nuevo y que cuiden a los argentinos’, agregó.
‘Yo espero y le pido a Dios que dentro de cuatro años, quien tenga la responsabilidad de conducir los destinos de la Patria, pueda frente a una plaza como esta decirle a todos los argentinos que también puede mirarlos a los ojos‘, dijo Cristina Fernández de Kirchner.
Antes de su discurso en Plaza de Mayo, Cristina rindió por la tarde un homenaje al exmandatario Néstor Kirchner al descubrir una escultura en el Salón de Bustos de Presidentes Argentinos de la Casa Rosada y recordó que, pese a haber asumido el gobierno con la ‘menor cantidad de votos‘ de toda la historia, ‘construyó una nueva Argentina‘ a partir de sus ‘convicciones, coraje, decisión y visión estratégica‘. DyN y Télam
